Una de las tareas que tiene pendiente el
Gobierno para este año es la elaboración de la
nueva Ley de Industria, con la que, además de actualizar la vigente (que ha cumplido treinta años este 2022) tiene como principal misión adaptarse a a las actuales necesidades del mercado. La normativa ya ha salido del cascarón y se encuentra en la fase de presentación de alegaciones. El
sector pharma ya ha presentado sus peticiones, aunque de momento se ha descartado que tenga un apartado propio para esta industria.
Según ha explicado a
Redacción Médica el departamento que lidera
la ministra Reyes Maroto, la redacción de la nueva Ley de Industria será "de carácter general", de forma que no tendrá un apartado específico para sectores industriales concretos. De forma que la
industria farmacéutica no sumará una 'casilla especial' en este caso, aunque parte del sector lo reclamase.
De hecho, el sector farmacéutico español es uno de los interesados en que esta normativa se ajuste lo máximo posible a sus necesidades, sobre todo, después de haber pasado lo peor de
la pandemia del Covid-19. Precisamente, entre sus
peticiones a la norma se encuentra la inclusión de incentivos específicos y la creación de un mecanismo de
cogobernanza, en cuya estructura se implique a las patronales de los sectores que más contribuyen al
Producto Interior Bruto (PIB), como es el caso de esta industria.
Si bien, aunque en un principio no se descartaba un apartado propio para la industria farmacéutica, aunque dependía de si el sector lo proponía o no, en estos momento
el Ministerio de Industria no lo considera.
La nueva Ley de Industria, tal y como explica el Gobierno, busca dar respuesta a la cobertura de las necesidades y de los grandes retos que la actual ley no ofrece. "La
fortaleza industrial de España es una prioridad y un vector clave del plan europeo de recuperación económica, por lo que el objetivo de la Ley no es solo regular la
actividad industrial, sino establecer instrumentos y procedimientos de política y promoción industrial que permitan la adecuada, eficiente y rápida adaptación y transformación de la industria para hacer frente a todos estos
cambios y situaciones presentes y futuras".
Nueva Ley de Industria: objetivos y plazos
Esta nueva ley, que forma parte del
Plan de Recuperación, tiene también como objetivo establecer el marco de seguridad y calidad industrial que permita el desarrollo de las empresas en línea con las exigencias del mercado, a la vez que contemple las
normas básicas de ordenación de las actividades industriales por las
Administraciones Públicas, los medios y procedimientos para coordinar las competencias en materia de industria de dichas organizaciones.
Precisamente, la ministra Maroto ha invitado a todos los agentes económicos y sociales a que aporten sus ideas a la nueva ley con un doble objetivo: la necesaria reactivación económica y social y la
modernización del modelo productivo para abordar con éxito la doble
transición digital y ecológica y lograr una mayor
cohesión social y territorial.
Ley de Industria: qué pide el sector farmacéutico
La inclusión de incentivos específicos y la creación de un mecanismo de cogobernanza, en cuya estructura se implique a las patronales de los sectores que más contribuyen al PIB, como es el caso de la industria farmacéutica.
Precisamente, éstas son algunas de las recomendaciones que ha realizado la
Asociación Española de Medicamentos Biosimilares (Biosim) a la nueva ley que, hasta hace poco más de 24 horas, ha estado abierta a consulta pública previa. Asimismo, explicó a este medio que esta normativa "es una oportunidad de promover el crecimiento del tejido industrial farmacéutico nacional y que éste no solo contribuya a paliar los efectos de futuras crisis, sino que actúe también como
motor científico y económico de España".
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