El laboratorio
GSK cerró el primer semestre del año
con un beneficio neto atribuido de 3.114 millones de libras (
3.627 millones de euros) y
un incremento interanual del 17,9 por ciento, según ha informado este miércoles la compañía.
Por su parte,
los ingresos fueron de 14.129 millones de libras (
16.458 millones de euros), solo un 0,07 por ciento por encima de los obtenidos en 2022. Por divisiones de negocio,
las medicinas especializadas facturaron 4.759 millones de libras (
5.543 millones de euros), con una bajada interanual del 18 por ciento.
En cambio,
las medicinas generales aumentaron un ocho por ciento su volumen de ventas
y
consiguieron ingresos de 5.307 millones (
6.182 millones de euros).
Las vacunas también aumentaron su facturación en un 20 por ciento, hasta los 4.063 millones de libras (4.732 millones de euros).
Los datos del segundo trimestre del año
En cuanto al
segundo trimestre del año, la compañía británica
se anotó ganancias de 1.624 millones de libras (
1.891 millones de euros), un 93,8 por ciento más que en 2022. A su vez, consiguió un incremento interanual de los ingresos del cuatro por ciento, alcanzando los 7.178 millones (8.361 millones de euros).
Ante estos resultados, el laboratorio británico ha actualizado sus previsiones para el ejercicio actual. Así, ahora
esperan que sus ingresos aumenten entre un ocho y un 10 por ciento y conseguir un crecimiento en el beneficio operativo ajustado de entre el 11 y el 13 por ciento.
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