Gilead demuestra con un fármaco altas tasas de supresión virológica en VIH

Se presentan nuevos datos sobre la eficacia de esta opción para personas que tengan a la vez hepatitis B o tuberculosis

Jared Baeten vicepresidente de Desarrollo Clínico de VIH de Gilead Sciences.

08 mar 2024. 14.50H
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Gilead Sciences ha anunciado los nuevos resultados de dos estudios que evalúan el perfil de eficacia o la seguridad de su tratamiento para diferentes situaciones de personas con VIH, incluidas aquellas con coinfección VIH/hepatitis B (VHB) y VIH/tuberculosis (TB). Estos datos, y otros estudios que respaldan la importancia de las mutaciones de resistencia en el manejo del VIH, han sido presentados en la 31ª Conferencia sobre Retrovirus e Infecciones Oportunistas (CROI).

"Las personas con VIH con comorbilidades o resistencias preexistentes al tratamiento, a menudo pueden enfrentarse a situaciones complejas y experimentar evolución en sus necesidades. Estos estudios se llevaron a cabo para ayudar a mejorar el abordaje del VIH y comprender mejor el potencial de nuestro fármaco en un perfil de pacientes y colectivos afectados por la patología y sus distintas necesidades en salud", dijo Jared Baeten vicepresidente de Desarrollo Clínico de VIH de Gilead Sciences.

"Los datos presentados en CROI contribuyen a la creciente evidencia de Biktarvy en el largo plazo y refuerzan el compromiso de Gilead con un enfoque centrado en la persona y en la investigación del tratamiento del VIH", añadió.


Coinfección VIH/VHB


Alliance es un estudio de Fase 3 que evalúa la eficacia y seguridad del Biktarvy en comparación con dolutegravir 50 mg (DTG) + emtricitabina 200 mg/tenofovir disoproxil fumarato 300 mg, en adultos con coinfección VIH/VHB que inician tratamiento (naïve). El estudio Alliance 2 es el primer ensayo clínico aleatorizado que analiza el tratamiento basado en TAF versus TDF en adultos naïve con esta coinfección. Su objetivo es evaluar regímenes de tratamiento que puedan suprimir eficazmente tanto el VIH como el VHB.

Un nuevo análisis presentado en CROI ha investigado los factores asociados con la respuesta al tratamiento del VHB observado con la terapia de Gilead, en comparación con DTG+F/TDF. Este análisis de subgrupos comparó las respuestas al tratamiento del VHB según las características demográficas iniciales, genotipo de VHB y marcadores de gravedad de la enfermedad VIH-1/VHB para todos los participantes a los dos años.

Los resultados sugieren que en personas con coinfección VIH/VHB, la respuesta al tratamiento para el VHB de la terapia basada en TAF versus TDF puede ser mayor para ciertos subgrupos, apoyando a la terapia con TAF como opción terapéutica en esta población. Algunos de los subgrupos que mostraron diferencias a favor de Biktarvy fueron: PVIH con menos de 30 años, PVIH con ciertos niveles o tipos de ADN/genotipos de VHB y aquellos con niveles de enzimas hepáticas basales más altas de lo normal, entre otros. El uso de este tratamiento en individuos con VIH/VHB está en investigación y la seguridad y eficacia de este uso no han sido establecidas.


Coinfección VIH/TB


La tuberculosis (TB) es la principal causa de muerte entre las personas con VIH. En 2022, aproximadamente 167.000 personas murieron por TB asociada al VIH, siendo el continente africano el de mayor prevalencia. A pesar del progreso significativo en la detección temprana y el tratamiento de la TB asociada con VIH, aún existen importantes desafíos terapéuticos. Las interacciones entre los antirretrovirales y los tratamientos para la TB complican el manejo de las infecciones duales. Las interacciones farmacológicas que involucran al fármaco de primera línea para la TB, rifampicina, son particularmente relevantes a nivel clínico para varios tratamientos antirretrovirales.

Los tratamientos basados en inhibidores de la integrasa (INIs) de segunda generación son los recomendados por las principales guías de tratamiento del VIH. Existe todavía una falta de información clínica sobre las combinaciones de INIs y los fármacos utilizados para la tuberculosis que debe abordarse para informar sobre el tratamiento conjunto de esta coinfección. Insight es un estudio de Fase 2b abierto, controlado y aleatorizado realizado en colaboración con una serie de organizaciones, incluido el Centro para el Programa de Investigación del SIDA en Sudáfrica (Caprisa). Su objetivo fue investigar la eficacia, seguridad y farmacocinética de Biktarvy en pacientes infectados por VIH-1, sin tratamiento previo y con coinfección por TB que estuvieran recibiendo un régimen de tratamiento para la TB basado en rifampicina. Los pacientes fueron aleatorizados a recibir Biktarvy o el estándar de tratamiento (Dolutegravir (DTG) + lamivudina 300mg/ tenofovir disoproxilo fumarato 300mg).

Ambos tratamientos se tomaron dos veces al día durante la terapia concomitante para la TB y hasta dos semanas después de detener dicho tratamiento. Posteriormente, se continuó con una única toma diaria hasta las 48 semanas. El objetivo principal fue analizar la tasa de supresión virológica del VIH en la semana 24, definida como HIV-1 RNA ˂50 copias/mL.

Los resultados preliminares de la semana 24 presentados en CROI mostraron que el 97 por ciento de los participantes tratados con bictegravir 50 mg/emtricitabina 200 mg/tenofovir alafenamida 25 mg lograron una supresión viral (VIH-1 ARN < 50 copias/mL), al igual que el 97 por ciento de los participantes tratados con el régimen basado en DTG (análisis por protocolo). Los eventos adversos graves (EA) fueron comunes en esta población con enfermedad avanzada por HIV y TB. Sin embargo, ninguno de los EA reportados se consideró relacionado con el fármaco del estudio. Se reportó un número similar de EA de Grado 3 y Grado 4 en ambos grupos.

"Sudáfrica tiene la mayor epidemia de VIH en el mundo, con más de siete millones de personas con este virus, más de la mitad de las cuales tienen la coinfección latente de TB," dijo Anushka Naidoo, científico investigador, Caprisa4, e investigador principal del estudio Insight 3.

"La disponibilidad de opciones de terapia antirretrovirales es muy relevante, especialmente en entornos con una alta carga de coinfección VIH/TB. Los hallazgos clave de este estudio histórico presentado en CROI respaldan la necesidad de la evaluación de Biktarvy en personas con VIH y TB como un tratamiento potencial para cerrar una brecha crítica de información en esta coinfección."


Mutaciones asociadas a resistencia


Las mutaciones genéticas son aleatorias en el VIH. Algunos de estos cambios impiden que los medicamentos contra el VIH funcionen; a estos cambios se les llama mutaciones de resistencia. Para entender cuánto tiempo permanecen las mutaciones de resistencia en el cuerpo, los investigadores analizaron los patrones genéticos del VIH (genotipo del VIH) a lo largo del tiempo en los participantes de tres estudios clínicos.

Se recopilaron datos del genotipo al comienzo de los ensayos clínicos y, en el caso de algunos participantes, también se disponía de informes de genotipos previos. Los investigadores examinaron estos informes para averiguar si las mutaciones de resistencia persistían, aparecían de nuevo o desaparecían en una cohorte de participantes de tres ensayos que cambiaron al tratamiento con Biktarvy tras lograr la supresión virológica durante al menos tres meses previos con su régimen antirretroviral anterior.

La mayoría de las mutaciones asociadas a resistencia en el análisis se detectaron de manera persistente en el tiempo o bien fueron detectadas de novo y no desaparecieron con el tiempo. Las mutaciones de resistencia archivadas en las células pueden persistir a pesar de la supresión virológica, representando un riesgo de transmisión de virus resistentes a los antirretrovirales en casos de fracaso virológico, interrupción del tratamiento o falta de adherencia. "Los profesionales sanitarios deben considerar todos los tratamientos farmacológicos previos y los informes de genotipo, y no deben asumir que las mutaciones de resistencia ya no están presentes simplemente porque no aparecen en el análisis genotípico más reciente; ya que pueden reaparecer más adelante. Estos resultados resaltan la importancia de conocer el historial de tratamiento de un individuo y el estado previo de mutaciones de resistencia para el manejo del tratamiento", sostiene Gilead.

Actualmente, no existen tratamientos con finalidad curativa para el VIH o el SIDA.
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