Redacción. Barcelona
Una semana después de que el diario El País revelara su relación con la Fundación CatDem, el hermetismo continúa instalado en Esteve. Desde entonces, un silencio absoluto reina en el laboratorio catalán, salpicado por el escándalo en el que se ha visto envuelta la fundación, epicentro del llamado 'caso 3%'.
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Albert Esteve, consejero delegado de Esteve.
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Pasados siete días desde que la relación entre el grupo catalán y CatDem saltara a la palestra pública, nadie en Esteve se ha manifestado al respecto. Coincidiendo con la publicación de las donaciones realizadas, Redacción Médica se puso en contacto con su departamento de comunicación para conocer, sin éxito, su versión de todo lo acontecido. Así las cosas, en vez de defender la completa legalidad de su actividad, se ha inmerso en una ley del silencio con la que parece 'otorgar' a quienes puedan dudar de ella.
La aparición de la compañía como una de los principales benefactoras de CatDem, fundación perteneciente a Convergencia Democrática de Catalunya (CDC) y que está siendo investigada por la Fiscalía Anticorrupción ante la sospecha de que, entre 2008 y 2013, fuera utilizada para cobrar comisiones ilegales a cambio de licitaciones de obras públicas y servicios por parte de gobiernos del partido, que supuestamente terminaba por ser beneficiario último de la mayor parte de las mismas.
Durante el periodo investigado, en el que el laboratorio estuvo comandado por Antoni Esteve primero y su tio Juan Esteve después, Esteve realizó a CatDem donaciones por valor de 325.000 euros, convirtiéndose con ellos en la quinta entidad con más presencia dentro de una lista en la que el Grupo Agbar ocupa la primera posición con Teyco, empresa en la que se centra la investigación, como antecesora directa. Durante dicho periodo, el grupo farmacéutico fue elegido en procesos de licitación abiertos por la Generalitat Catalana, la Fundación de Gestión Sanitaria del Hospital de la Santa Creu y Sant Pau y la Corporación Sanitaria Parc Taullí, entre otros.
Se reavivan las dudas
Además de no explicar la situación, la actitud tomada por Esteve ha avivado viejas dudas en torno a adjudicaciones que se podrían calificar como insólitas. Es el caso del recibido en 2008 por Oximeplus, creada por el laboratorio junto a la japonesa Teijin, que se llevó nueve de los doce lotes sacados a concurso para dar el servicio de oxigenoterapia domiciliaria en toda Cataluña a pesar de ser una empresa 'novata'. Ya entonces, dicha decisión fue duramente criticada por la neumología regional, que llegó a advertir del peligro que la concesión suponía para los pacientes por su dimensión tratándose de una compañía sin apenas experiencia.
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