Esteve Healthcare ha cerrado el 2022 con un
15 por ciento de aumento de los ingresos netos, en comparación con el 2021. Alcanza de esta manera los 644 millones de euros, lo que muestra un crecimiento de doble dígito por segundo año consecutivo. Además,
Lubea, una firma de inversión privada alemana, ha adquirido parte de sus acciones.
Desde la redefinición de su plan estratégico en 2018, Esteve ha ido
ampliando su portafolio de medicamentos en áreas de medicina especializada y ejecutando su hoja de ruta estratégica. Esto incluye la desinversión de su división de genéricos (2019), la adquisición de la compañía farmacéutica alemana Riemser (2020), el rediseño de su modelo de innovación (2020) y la apertura en 2022 de
dos nuevas filiales en Europa (Portugal e Italia).
Para permitir un mayor crecimiento y expansión internacional, Esteve ha anunciado un
acuerdo estratégico con Lubea y los alemanes han adquirido una participación minoritaria del 26 por ciento en Esteve, inyectando así capital en la empresa. Este nuevo acuerdo no altera la estructura organizacional del grupo que seguirá siendo el accionista mayoritario.
"Nos complace de tener a Lubea a bordo como partner estratégico. Esta inversión nos proporcionará los recursos necesarios para
acelerar nuestro crecimiento y expandir nuestra presencia en los mercados internacionales, sin dejar de ser fieles a nuestro propósito de mejorar la vida de las personas a través de nuestros
productos farmacéuticos innovadores", concluye Staffan Schüberg, Chief Executive Officer de Esteve.
2022, un año con hitos significativos
La adquisición de un
centro industrial en Lliçà de Vall (Barcelona) a principios de 2022, ha incrementado la capacidad de producción de principios activos farmacéuticos de Esteve
en un 20 por ciento, mientras que el lanzamiento de Seglentis, molécula desarrollada íntegramente por Esteve, en Estados Unidos para el tratamiento del dolor agudo en personas adultas ha sido el hito más importante del año.
La franquicia del sistema nervioso central de Esteve en Alemania, con
Inbrija (enfermedad de Parkinson) como producto principal, fue otro hecho relevante. Los medicamentos de la compañía han llegado a más de siete millones de personas en todo el mundo, y ha interaccionado con más de
55.000 profesionales de la salud para mejorar el bienestar del y la paciente.
Impacto positivo en empleados, sociedad y medio ambiente
La apuesta de Esteve por el crecimiento y el desarrollo se refleja en su expansión del
16 por ciento de la plantilla en el último año, alcanzando los 1.824 empleados y empleadas en todo el mundo. En referencia a la igualdad, a cierre del ejercicio, el porcentaje de puestos directivos de la compañía ocupados por mujeres era del 43 por ciento, en línea con el objetivo de alcanzar más del 45 por ciento de mujeres en
puestos de liderazgo en 2025.
En el ámbito social, Esteve ha destinado
más de 800.000 euros para generar un impacto positivo en la sociedad a través de diferentes iniciativas en colaboración con más de 30 entidades, para apoyar a pacientes, comunidades y grupos de población más vulnerables.
Los esfuerzos de la compañía para
mitigar el cambio climático incluyen el uso de energía 100 por ciento renovable en sus plantas de producción en España y su centro de investigación y desarrollo. Esteve también mantiene las mejores prácticas para lograr una gestión sostenible de los residuos y contribuye a la promoción de la economía circular. El 70 por ciento de los disolventes utilizados en 2022 pueden reutilizarse en otros usos o sectores, y el 58 por ciento de los residuos se han
destinado a la reutilización, con el objetivo de reducir su impacto en la medida de lo posible.
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