Los reclutadores privados contratados por
Moderna para conseguir voluntarios para
probar su vacuna contra el Covid-19 no pudieron inscribir a "suficientes participantes negros, latinos y nativos americanos para
determinar cómo funciona la vacuna en estas poblaciones", han afirmado a Reuters ejecutivos de la compañía.
Para compensar el déficit, Moderna
ralentizó la inscripción en la última etapa de su ensayo e instruyó a los centros de investigación para que se centren en
aumentar la participación entre los voluntarios de las minorías, según la compañía. Cinco investigadores que trabajan en el ensayo de Moderna han señalado que los reclutadores llenaron rápidamente una gran parte del
cupo de 30.000 voluntarios y que en su mayoría son blancos.
Esto a pesar de que el Covid-19
infecta a los negros casi tres veces más que a los blancos en Estados Unidos, y que tienen el doble de probabilidades de morir a causa del virus, según un informe de la Liga Urbana Nacional y otros estudios.
Paul Evans, director ejecutivo de
Velocity Clinical Research en Durham, Carolina del Norte, cuya compañía fue contratada para probar la vacuna Moderna en cinco lugares, ha apuntado que los esfuerzos para inscribir voluntarios de diversos orígenes para proporcionar un equilibrio poblacional adecuado son "
notoriamente difíciles" en cualquier ensayo clínico. "Si hay un problema con el reclutamiento de minorías, y lo hay, no se puede solucionar de la noche a la mañana", ha afirmado.
Porcentaje de minorías en el ensayo de Moderna
Los estadounidenses de raza negra
representaron solo alrededor del 7 por ciento del ensayo hasta el 17 de septiembre. En realidad, debería estar cerca del 13 por ciento para reflejar la población real de EEUU.
Durante las últimas dos semanas de septiembre, Moderna ha aseverado que aumentó la proporción de voluntarios negros, pero
se negó a proporcionar detalles. Una mayor participación de este grupo poblacional en los ensayos podría ayudar a abordar la desconfianza entre las comunidades de color y la industria médica después de años de
subrepresentación en la investigación farmacéutica.
Una cuarta parte de los 100 lugares de prueba de Moderna están a cargo de centros académicos que forman parte de la
Red de ensayos de prevención Covid-19 del Instituto Nacional de Salud (NIH) (CoVPN), mientras que el resto son en gran parte subcontratistas comerciales.
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