Las
incorporaciones terapéuticas no han parado durante este año a pesar de la inestabilidad política. El Ministerio de Sanidad ha trabajado este año, varios meses en funciones, y a través de la
Comisión Interministerial de Precios de los Medicamentos y Productos Sanitarios (CIPM) ha introducido un total de 58 medicamentos donde hay hitos importantes como
terapias CAR-T, la vacuna del Virus Respiratorio Sincitial (VRS) o una inyección para el colesterol.
Concretamente, las
aprobaciones de nuevos medicamentos se han dividido de la siguiente forma a lo largo del año: enero (0), febrero (3), marzo (3), abril (5),
mayo (8), junio (3),
julio (9), agosto (0), septiembre (7), octubre (4), noviembre (8) y diciembre (9). El primer mes y el octavo del año
no hubo reuniones de este órgano y, por ello, tampoco se dio luz verde a ningún producto.
Por lo tanto, en este 2023 se han incorporado a la
prestación farmacéutica del Sistema Nacional de Salud (SNS) un
total de 58 fármacos (59 aunque uno ha sido aprobado en dos indicaciones diferentes) por la
CIPM. Esta comisión es la encargada de fijar, conforme a criterios objetivos, tanto los procedimientos de financiación por el SNS como los de
revisión de precio, los precios industriales de financiación de las presentaciones de medicamentos y productos sanitarios susceptibles de ser incluidas o ya incluidas en la prestación farmacéutica del
SNS. Aunque en este caso solo hemos contabilizado las nuevas aprobaciones, en cada documento emitido se señalan también
nuevas indicaciones, alteraciones de la oferta y alegaciones.
Fármacos importantes aprobados en 2023
En este sentido, el año ha estado marcado por medicamentos importantes para el
cáncer de mama HER2-positivo localmente avanzado o metastásico como
Tukysa que se administra en combinación con trastuzumab y capecitabina en adultos. Mientras que
Lumykras también recibió luz verde este año, como monoterapia está indicado para el tratamiento de adultos con
cáncer de pulmón no microcítico (CPNM) avanzado con mutación KRAS G12C y que hayan progresado tras, al menos, una línea de tratamiento sistémico previo.
Asimismo, la
terapia CAR-T Tecartus H tiene el visto bueno de la CIPM para el tratamiento de pacientes adultos con
linfoma de células del manto (LCM) refractario o en recaída después de dos o más líneas de tratamiento sistémico, incluido un inhibidor de la tirosina-quinasa de Bruton. Una noticia muy esperada por los pacientes que confían en esta terapia génica.
Otro de los fármacos más esperanzadores que ha traído este año es
Beyfortus que se inyecta para prevenir la enfermedad de las vías respiratorias inferiores producida por el
VRS en neonatos y lactantes durante su primera temporada de este virus. De hecho, para controlar esta patología también se ha incorporado al SNS
Abrysvo, una
vacuna para proteger frente a la enfermedad del tracto respiratorio inferior causadas por el virus en los lactantes desde el nacimiento hasta los 6 meses de edad tras la inmunización materna durante el embarazo.
Por otro lado, ha llegado para quedarse
Leqvio, un medicamento revolucionario del
colesterol, ya que con dos pinchazos anuales permite controlar hipercolesterolemia primaria (heterocigótica familiar y no familiar) o dislipidemia mixta en adultos. Otro de los hitos que se han recibido el 'ok' en estas reuniones de la CIPM ha sido
Livtencity, el único tratamiento para
citomegalovirus postrasplante.
No obstante, entre estos casi 60 tratamientos aprobados también ha habido destinados a otras enfermedades como
asma, psoriasis, alzhéimer, rinitis alérgica, artrosis, enfermedad de Crohn, etc.
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