Arranca el nuevo curso político en la Comisión Europea (CE) y una de las propuestas que se ha puesto sobre la mesa es penalizar a aquellos que tarden
más de 30 días en pagar una factura de una Pequeña y Mediana Empresa (PYME). Aunque este plazo es el actual, la diferencia radica en que
se reducen las exenciones permitidas. Según los tiempos que manejan en Bruselas, en la actualidad más del 60 por ciento de recibos se pagan tarde. En el caso de las empresas sanitarias, afecta principalmente a aquellos que
son de uso hospitalario.
"Nosotros tenemos asociados con venta hospitalaria a los que les beneficiaría esta medida. Al final es el hospital el que
compra al laboratorio correspondiente y ahí es cuando se generan las facturas a pagar, cliente y proveedor tienen un contacto directo", explica Ángel Luis Rodríguez de la Cuerda, secretario general de Asociación Española de Medicamentos Genéricos (Aeseg). "Todo lo que sea
optimizar, de acuerdo a la ley, y que haga que se respeten los plazos es bienvenido en nuestro sector", añade.
Por ejemplo, uno de los cambios que aporta la Comisión es que
algunas entidades públicas, como los hospitales, dejarán de poder ampliar el plazo. Asimismo, quieren acotar la opción de que las empresas
negocien otros plazos más amplios a la hora de abonar las facturas. Una posibilidad que se les permitía siempre y cuando no se considerara "extremadamente injusto", lo cual
generaba bastantes vacíos legales.
Por su parte, Thierry Breton, comisario de Mercado Interior, ha apuntado esta semana que el objetivo de Europa con esta iniciativa es
facilitar la expansión de las Pymes mejorando su acceso a la financiación, al tiempo que luchan contra la excesiva carga administrativa y los retrasos en los pagos. Concretamente, uno de los motivos por los que
un cuarto de las compañías acaba cerrando es por retrasos en pagos, que pueden superar los 100 días. El siguiente paso ahora es que la propuesta sea aceptada por las capitales europeas y
la Eurocámara.
Impagos significativos en 2008
De hecho, Rodríguez de la Cuerda recuerda que en 2008, en el momento de la crisis económica, esta situación se volvió
"difícil de asumir" para las compañías: "Hubo un retraso importante en tiempo y en cantidad de pagos". No obstante, la mayor parte de las transacciones de medicamentos genéricos no sufren problemas de este tipo, puesto que se realizan
a través de la Oficina de Farmacia. En palabras del secretario general de Aeseg, el circuito del genérico ahí es: el laboratorio vende al distribuidor, el distribuidor a la farmacia y la farmacia al paciente. "La farmacia cobra en general de manera regular de las administraciones autonómicas. Por lo tanto, se adecúan a los plazos", detalla.
Otro de los aspectos que quiere abordar la Comisión Europea con esta normativa es que las empresas puedan
pagar impuestos según la normativa de su país de origen, a pesar de que sus negocios estén en varios países miembros de la Unión Europea.
En este mismo sentido, el Ministerio de Hacienda español hizo públicos hace escasos días un
descenso en el Periodo Medio de Pago a Proveedores (PMP): "En concreto, las Comunidades Autónomas han alcanzado en junio de 2023 un plazo de 21,73 días, lo que supone una cifra inferior a los 30 días establecidos como límite legal. En este subsector, el PMP ha
descendido en 1,75 días en relación con el mes anterior". Mientras que el plazo de pago de la Administración Central se ha cifrado en el sexto mes del año en 24,74 días, lo que supone
una bajada de 3,14 días en relación con el mes anterior.
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