Ipsen ha presentado un total de nueve abstracts en los que se ofrecen nuevos datos referidos a los tumores neuroendocrinos (TNE), en el marco de la
18ª Conferencia de la Sociedad Europea de Tumores Neuroendocrinos (ENETS), que se celebra de modo virtual del 25 al 27 de febrero. Estas publicaciones incluyen datos del estudio fase II Clarinet Forte y datos sobre la administración autónoma por parte del paciente de
lanreotida autogel.
Los datos actualizados presentados del estudio incluyen datos adicionales sobre calidad de vida, de las evaluaciones que los pacientes han ido realizando durante el periodo del estudio.
La calidad de vida de los pacientes se evaluó mediante tres cuestionarios referidos a la gravedad de los problemas asociados a la
movilidad, el autocuidado, las actividades habituales, el dolor/malestar y la ansiedad/depresión (EQ-5D-5L), así como cuestionarios específicos para pacientes con cáncer (EORTC QLQ-C30) y con tumores neuroendodrinos (QLQGINET.21). Los resultados sugieren que
no se produjo un deterioro de la calidad de vida ni una desviación sustancial respecto a los valores de referencia antes del inicio del tratamiento.
Los
análisis farmacocinéticos (PK según sus siglas en inglés) adicionales del régimen de dosificación incrementado mostraron que la farmacocinética aumentó de manera proporcional y
no se observó ningún incremento en las tasas de glucorregulación, colelitiasis o hipertensión en los pacientes con una mayor exposición a lanreotida autogel.
Importante indicador
La confirmación de los datos farmacocinéticos en el periodo estudidado junto con la calidad de vida mantenida, muestran que los datos del estudio podrían representar
una opción de tratamiento potencialmente significativa para una población de pacientes con importantes necesidades insatisfechas.
"Los nuevos resultados del ensayo Clarinet Forte pusieron de manifiesto que la calidad de vida se mantuvo estable a lo largo del estudio en los pacientes
con enfermedad progresiva y que recibían las inyecciones con el doble de frecuencia en comparación con su tratamiento antes del estudio", afirmó
Marianne Pavel, de la Universidad Friedrich-Alexander de Erlangen (Alemania), médico titular y catedrática de
Endocrinología, e investigadora principal del estudio.
"Se trata de un nuevo e importante indicador, ya que refleja
la percepción de los pacientes sobre su propio estado de salud y significa que los pacientes con TNE progresivos podrían permanecer con un tratamiento estándar de primera línea
más tolerable durante más tiempo sin que aparezcan nuevas señales de seguridad o deterioro de la calidad de vida".
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