El 29 de marzo es la fecha escogida para que
Reino Unido pida, formalmente, su desconexión del conjunto de la
Unión Europea. Se espera que el proceso
(Brexit) tenga hondas consecuencias para el tejido productivo del viejo continente, aunque el
sector farmacéutico inglés podría no salir tan mal parado del mismo.
Según una serie de
valoraciones publicadas por la agencia Bain & Company, cuanto más duro sea el Brexit, mejor será para los
laboratorios británicos que exporten sus productos. Y es que las c
ompañías farmacéuticas se encuentran entre las que más se podrían beneficiar de la previsible depreciación de la
libra y de una caída de los
impuestos para fomentar la inversión.
De hecho, Bain & Company considera que los
beneficios de multinacionales británicas como AstraZeneca y GlaxoSmithKline (GSK) podrían aumentar entre un dos y un tres por ciento. En cambio, este escenario no sentaría igual de bien a otros sectores productivos.
Las alteraciones en la cadena de suministro originadas por un Brexit duro tendrían la capacidad de disminuir las ganancias netas otros ámbitos en un 30 por ciento, con la industria del automóvil y los sectores 'retail' y tecnológico como los principales perjudicados.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.