No todos los integrantes de la próxima
Comisión Interministerial de Precios de los Medicamentos (CIPM) comparten el acuerdo entre
Sanidad y
Aspen Pharma respecto a la
oferta global de precios puesta sobre la mesa por esta compañía. Según ha podido saber
Redacción Médica, existen dos motivos que hacen que el
Ministerio de Industria guarde
ciertas reservas respecto al pacto que, según ha podido saber este periódico, la farmacéutica alcanzó con Sanidad.
El acuerdo choca con la posición general de Industria en la CIPM consistente en "apoyar a las
marcas farmacéuticas que tienen sede en España y que, por tanto,
invierten en I+D+i en territorio nacional”. Esta condición no se cumple con Aspen, que está
radicada en Sudáfrica y no tiene fábricas en España.
Por otra parte, esta compañía "ha presentado una
subida muy fuerte" del precio de los medicamentos incluidos en el 'pack'. No obstante, desde el ministerio insisten en que se trata de unos
fármacos "muy importantes" y que la "situación es complicada". Además, afirman que no se ha tomado una decisión respecto a su aprobación y que
todo dependerá de cómo se desarrolle la reunión en el CIPM.
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Industria apoya, como criterio general, a aquellas marcas farmacéuticas con sede en España
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Las fuentes ministeriales consultadas por este periódico apuntan que Industria se mantendrá
a la expectativa de la línea que marque en la reunión el
Ministerio de Sanidad, principalmente, y las
comunidades autónomas, sobre las que también recaería la financiación de estos fármacos.
Como ya informó Redacción Médica, la estrategia seguida por Aspen Pharma de cara a la reunión de la CIPM se apoya en un acuerdo alcanzado durante la etapa de
Encarnación Cruz Martos al frente de la
Dirección General de Cartera Básica. Este acuerdo estaría vigente a día de hoy y, salvo imprevisto, la proposición de la farmacéutica se aprobará.
La oferta de
fármacos citostáticos de Aspen incluye
melfalan comprimidos (165 euros),
melfalan inyectable (75 euros),
clorambucilo comprimidos (192 euros),
busulfan comprimidos (210 euros),
mercaptopurina (50 euros) y
tioguanina (180 euros). En algunos casos, estos precios
superan hasta en un 1.000 por ciento los que tenían hasta 2014, momento en que la farmacéutica anunció a la
Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) el
cese de su comercialización.
Antecedentes de la política de precios de Aspen
Desde la industria farmacéutica se teme que el caso de Aspen
abra la puerta a prácticas similares apoyadas en este precedente. Y es que la aprobación de este paquete de fármacos supondría una
revisión al alza de sus precios superior al 25 por ciento, con lo que rompería uno de los criterios habituales del CIPM, que habitualmente rechaza propuestas de revisión semejantes por esta misma razón.
Cabe destacar que la
política de precios de esta compañía ya ha generado alguna
polémica en
Europa. De hecho, en mayo de 2017 la
Comisión Europea anunció la apertura de una investigación sobre el laboratorio con el objetivo de dilucidar si utilizó su posición dominante en el mercado para subir injustificadamente precios. Según Bruselas, la farmacéutica ha incrementado varias veces sus medicamentos contra el cáncer
de forma "injustificada".
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