Las farmacéuticas AstraZeneca y MSD han firmado este jueves un
acuerdo estratégico de colaboración en oncología para tratar de promocionar Lynparza (olaparib). Se trata del primer inhibidor de la poli ADP-ribosa polimerasa (PARP) aprobado a nivel mundial.
Esta alianza, constituída en base al acuerdo global que se hizo efectivo en julio de 2017,
permitirá poner a disposición de un mayor número de pacientes los tratamientos más innovadores que suponen una diferencia real en su calidad de vida.
Es preciso recordar que olaparib
está aprobado como monoterapia para el tratamiento de mantenimiento de pacientes adultos con cáncer de ovario epitelial seroso de alto grado, de trompa de Falopio, o peritoneal primario, con mutación genética BRCA (germinal y/o somática),
sensible a platino, en recaída, que están en respuesta (respuesta completa o parcial) a quimioterapia basada en platino.
Actividad conjunta
A partir del acuerdo,
ambas compañías desarrollarán y comercializarán olaparib conjuntamente, tanto en monoterapia como en combinación con otros fármacos. Además, cada una de ellas desarrollará y comercializará olaparib de manera independiente en combinación con sus respectivas terapias inmuno-oncológicas.
La directora de la Unidad de Negocio de Oncología de AstraZeneca España, Mariluz Amador ha explicado que
"la oncología es una prioridad estratégica para AstraZeneca, nos avala una sólida tradición de más de 40 años enfocados al desarrollo de medicamentos oncológicos de nueva generación como los inhibidores de PARP o TKIs frente a mutaciones del EGFR y T790M. Por ello,
nos complace trabajar en estrecha colaboración con una compañía que comparte nuestra pasión por la ciencia para ofrecer nuevos tratamientos a los pacientes con cáncer", ha dicho.
Por su parte, el director médico en MSD, Joaquín Mateos, ha subrayado que
"nuestro principal objetivo es trabajar con AstraZeneca para crear un mayor valor para los pacientes. Como área estratégica prioritaria de la compañía, MSD continúa enfocando sus esfuerzos en I+D+i principalmente en oncología; ampliando y reforzando nuestro pipeline dentro de esta área, gracias a la incorporación de terapias dirigidas con los inhibidores de PARP y MEK", ha indicado.
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