Stada acaba de publicar un informe que recopila datos sobre el conocimiento, el comportamiento, la actitud y las necesidades en salud de ciudadanos de nueve países europeos, entre los que se incluye
España. El estudio 'El futuro de salud' señala algunos de los puntos fuertes del país, pero también los flacos. Por eso,
Peter Goldschmidt, CEO del laboratorio, ha explicado que tienen la "responsabilidad social" de hacerlo público: "No son solo resultados para Stada; también para el Gobierno".
"Lo importante es entrar en el
diálogo con la política", ha asegurado en un encuentro con periodistas españoles tras la rueda de prensa internacional, en Berlín. "Creo que el Ministerio de Sanidad puede aprovechar los resultados de nuestro informe, y creo que la población española es abierta de cara a l
a introducción de nuevas terapias".
Durante esta entrevista, el CEO de Stada habló sobre
medicamentos genéricos, un término que en España es bien conocido: más del 90 por ciento de los encuestados del país respondieron que se trata de "un tipo de medicamento que es igual que otro del mercado en cuanto a su composición y efecto, pero en general es más económico".
Medicamentos genéricos y Unión Europea
Al ser preguntado sobre su opinión acerca de la decisión de que la Unión Europea permita ahora su fabricación y almacenaje dos años antes del fin de la patente, Goldschmidt se ha mostrado
a favor: "Si hay una fecha para que venza la patente, los genéricos tienen que estar diponibles a partir de entonces. Se necesita un poco de adelanto para estar en tiempo. No hay que olvidar que nosotros no empezamos ese día a invertir en productos: lo hacemos mucho antes".
"Me parece correcto que tengamos la oportunidad de desarrollar un genérico antes del fin de la patente"
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Así, Goldschmidt ha explicado que, tras conocer la fecha de vencimiento, Stada comienza con el desarrollo y la investigación del genérico los cinco o seis años previos a esa fecha.
"Entonces -ha proseguido- me parece
correcto que nosotros tengamos la oportunidad de desarrollarlo antes. Tenemos grandes gastos en inversión para producir el medicamento. Y tiene que estar disponible a partir de la fecha en la que vence en patente. Esto también es
positivo para el
presupuesto de salud de los países".
Para Stada, ha asegurado, la
Unión Europea tiene
numerosas ventajas en cuanto a la formación, los estándares de calidad unificados o el no tener que registrar cada producto en cada país de una forma distinta, tal y como ha asegurado Goldschmidt.
Digitalización y robótica
También ha abordado el problema que tiene el país con los
desabastecimientos, para los que han decidido "tomar varias medidas para todas las terapias importantes", como no depender de una única fuente a la hora de conseguir las
materias primas. "Queremos asegurar el abastecimiento de los pacientes y obviamente tenemos un interés comercial", ha reconocido.
Otro de los puntos que aborda el estudio es la
digitalización y la
robótica. En España, el 53 por ciento de los encuestados aseguraron que podrían imaginarse siendo intervenidos quirúrgicamente por un
robot, siempre y cuando estuviera en supervisión constante y un médico pudiese intervenir en cualquier momento. El nueve, que los robots pueden ser más
precisos y
fiables que las personas.
"Nuestra opinión como empresa es que la
privacidad tiene que ser protegida. Es muy importante proteger los datos. Eso tiene que ser lo más importante". Por eso, ha resaltado el
control de calidad: saber que la
tecnología funcional. "No podemos decir que está bien en general; está bien si hay estudios previos que garanticen que se utiliza en beneficio del paciente", ha sentenciado.
Utilización de los datos
Y si el CEO de Stada quiere que los datos del estudio 'El futuro de la salud' sean abordados por los gobiernos de los distintos países donde se realizaron las 18.000 encuestas, también ha admitido que el laboratorio los tendrá muy en cuenta.
"La gran sorpresa para mí es la diferencia entre los países europeos"
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"La gran sorpresa para mí es la
diferencia entre los países. Eso me convenció aún más de que realizar campañas internacionales puede que no sea tan buena idea", ha explicado.
Por ejemplo, con
biosimiliares. En España, solo un 20 por ciento de los encuestados dieron con la respuesta correcta sobre lo que realmente son. En este sentido, Goldschmidt considera que deben informar a los pacientes, o formar a los profesionales, de forma distinta en ellos según su grado de conocimiento. Porque, una vez más, recalcó la importancia de tener un
diálogo abierto con todos los actores implicados en la salud para conseguir un mejor conocimiento de la sociedad. Así, ha dicho, mejorarán también las ventas de este laboratorio.
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