Un estudio de seguimiento de un año dirigido por
la Universidad de Texas ha revelado que la mayoría de los pacientes con
linfoma de células del manto resistentes a terapias previas pueden beneficiarse con la terapia de
células T del receptor de antígenos quiméricos (CAR) de CD19, según publican en la edición en línea del del
New England Journal of Medicine.
El estudio multicéntrico, de 20 hospitales,
Fase II ZUMA-2 informó que el 93 por ciento de los pacientes respondieron a la terapia con
células T CAR KTE-X19, y el 67 porciento logró una respuesta completa. En una mediana de seguimiento de un año, el 57 por ciento de los pacientes estaban en
remisión completa, y la supervivencia libre de progresión estimada y la supervivencia general fueron del 61 y 83 por ciento, respectivamente. En el momento de este análisis, el 76 por ciento de todos los pacientes tratados en el estudio estaban vivos.
En la terapia con
células CART, las células T de los pacientes se extraen mediante un proceso llamado leucoféresis y se rediseñan genéticamente con moléculas CAR que ayudan a las células T a atacar las células cancerosas. Las células T rediseñadas se vuelven a
infundir en el paciente. En este estudio, se fabricó y administró a los pacientes un tipo de terapia
con células CART conocida como KTE-X19.
"'
ZUMA-2' es el primer estudio multicéntrico de fase II de la terapia con células T CAR para el linfoma de células del manto recidivante / refractario, y estos resultados de eficacia y seguridad son alentadores", destaca
Michael Wang, profesor de linfoma y mieloma.
"Aunque este estudio continúa, nuestros resultados informados, incluido un perfil de seguridad manejable, apuntan a esta terapia como una opción efectiva y viable para pacientes con linfoma de células del
manto recidivante o refractario", añade.
Terapia con inhibidores de BTK
Todos los pacientes tenían una enfermedad recidivante o resistente al tratamiento después de recibir hasta cinco terapias, y todos los pacientes habían recibido la terapia inhibidora de
la tirosina quinasa (BTK) de Bruton.
La terapia con inhibidores de BTK ha mejorado enormemente los resultados en pacientes con linfoma de células del manto recidivante o refractario; sin embargo, los pacientes que tienen progresión de la enfermedad después de recibir el tratamiento
probablemente tengan malos resultados, con una mediana de supervivencia general de
solo seis a 10 meses. Pocos pacientes en esta categoría califican para proceder a un trasplante alogénico de células madre.
En este estudio, la mediana de edad de los pacientes fue de 65 años, y el 84 por ciento eran hombres. Más del 80 por ciento de los pacientes tenían
enfermedad en estadio IV, y más de la mitad fueron diagnosticados como de riesgo intermedio a alto en un índice pronóstico de linfoma de células del manto.
El estudio informó efectos secundarios de grado tres o mayores, siendo los más comunes
la neutropenia y la trombocitopenia. La mayoría de los pacientes experimentaron el síndrome de liberación de citoquinas, un efecto secundario común de la terapia con células CART, pero el síndrome se manejó efectivamente en todos los pacientes.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.