Las
terapias CAR-T han supuesto una auténtica revolución frente a las
enfermedades hematológicas, aunque su potencial empieza a ser testado también contra las
patologías autoinmunes. En este sentido, el
Hospital Vall d’Hebron anuncia este jueves que incluirá al primer paciente de un
estudio internacional pionero en el uso de la terapia CAR-T para
enfermos refractarios al tratamiento convencional en lupus.
La investigación, impulsada por
Novartis, contará con un total de
12 pacientes de entre 18 y 65 años con
lupus grave y que no responden a los tratamientos habituales.
Josefina Cortés, médica internista y reumatóloga especialista en lupus del
Servicio de Reumatología del Vall d’Hebrón, afirma que “el primer paciente ya está siendo tratado, en una semana se incorporará otro y se espera incluir hasta un
tercer paciente. El lupus es una
enfermedad muy compleja que se puede presentar de múltiples formas. Se desconoce su origen y afecta a 210 enfermos por 100.000 habitantes. Afecta sobre todo a mujeres, en concreto a
nueve mujeres por cada hombre”.
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Cortés: "Nueve mujeres por cada hombre llega a sufrir lupus"
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Los grandes resultados cosechados en un
estudio europeo realizado a finales de 2022 fueron la clave para seguir impulsando la investigación frente al lupus con CAR-T. Tal y como recuerda Cortés, “se realizó una
prueba piloto a cinco pacientes con lupus en Alemania. Se logró una remisión clínica y se pudo eliminar la medicación. Estos análisis se deben analizar con precaución, por lo que el Vall d’Hebrón se une a un ensayo clínico multicéntrico impulsado por Novartis. Diferentes centros de
Francia,
Alemania y
Australia participarán en la investigación. En España, el
Vall d’Hebrón y el
Hospital Gregorio Marañón formarán parte del ensayo”.
El procedimiento que permite la creación de la terapia CAR-T para cada paciente es explicado por
Mónica Linares, médica especialista en Hematología del
Banco de Sangre y Tejidos de Cataluña (BST): “Cuando un paciente es candidato a recibir CAR-T, se le recogen una bolsa con un tipo de glóbulos blancos conocidos como
linfocitos. Después de aplicar
aféresis, se envía la muestra a la sede del banco de sangre y se entrega a Novartis para fabricar la terapia CAR-T.
El proceso de monitorización del paciente CAR-T
Pere Barba, hematólogo y director del Programa CAR-T en el Vall d’Hebrón, recuerda el gran abanico de posibilidades que llega a ofrecer este tipo de terapia: “
Las CAR-T son un tratamiento que está en uso y expansión en muchas indicaciones, la mayoría
cánceres,
linfomas,
mielomas y
leucemias agudas. Además, también se ha comprobado su potencia frente a enfermedades autoinmunes, como el lupus, motivo por el cual se inicia este ensayo. Antes de recibir CAR-T, los pacientes tienen que pasar una
sesión de quimioterapia de baja intensidad, para preparar el cuerpo. Una vez las células son descongeladas, son infundidas y el paciente debe ser
monitorizado entre 10 y 14 días. Durante
dos semanas no pueden estar más lejos de 30 minutos del centro por si hay complicaciones, y una vez pasa este plazo ya podrían regresar a su ciudad de origen”.
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Barba: "El paciente durante dos semanas no puede estar más lejos de 30 minutos del centro por si hay complicaciones"
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Una vez finalice el ensayo, los pacientes serán sometidos a un
seguimiento durante dos años, fecha en que se conocerá hasta qué punto las CAR-T pueden llegar a convertirse en un tratamiento estándar y consolidado frente a esta enfermedad tan compleja como es el lupus
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