María Martín: "El feminismo es una cuestión de neuronas, no de sexo"

Dolors Montserrat, Carmen Montón y María Luisa Carcedo. Tres mujeres, de diferentes signo político, que han llegado a liderar el Ministerio de Sanidad y para las que María Martín Díez de Baldeón, exconsejera de Salud del Gobierno de La Rioja; sólo tiene palabras de halago. "Dar el paso de aceptar un ministerio ya es propio de personas comprometidas y generosas", subraya Martín, que forma parte del jurado de los Premios Sanitarias 2020.

La exconsejera coincidió con Carmen Montón cuando ésta era consejera. "Nos sentábamos al lado en el Interterritorial", recuerda Martín, que destaca el trabajo de la última ministra de Sanidad del PSOE, María Luisa Carcedo: "Solo estuvo unos meses e hizo una labor muy buena". Pese a las buenas 

"Como en casi todos los ámbitos, en los puestos directivos de la sanidad sigue habiendo una descompensación entre el número de hombres y el de mujeres"

palabras que dedica a sus 'rivales' en Política, la que fuera responsable de la salud riojana cofiesa su "admiración" por su compañera de filas, Dolors Montserrat, con la que tiene una estrecha relación. "Su paso no fue nada fácil y la verdad es que lo hizo muy bien. El Pacto de Estado contra la Violencia de Género fue un éxito rotundo. En estos tiempos, no es fácil llegar a consensos de este tipo". 

María Martín se cita con Redacción Médica en la madrileña Plaza de Colón, de la que parte rápidamente a una nueva cita en su apretada agenda. "Colón es un ejemplo de persona innovadora, aventurera y valiente; capaz de dar la vuelta al mundo aun siendo  consciente de las dificultades que conlleva. Es la forma de afrontar la vida y, por supuesto, la política sanitaria: hay que seguir avanzando, explorando para que la humanidad progrese", reflexiona la política, que considera un "privilegio" haber sido consejera de Salud de la Rioja hasta el pasado año.

"Yo creo que es un sector donde la mayoría de los profesionales son mujeres", advierte Martín, que considera que queda mucho por hacer. "Como en casi todos los ámbitos, en los puestos directivos sigue habiendo una descompensación entre el número de hombres y el de mujeres", denuncia la exconsejera que, no obstante, considera que las mujeres "están muy bien representadas en la sanidad". 

Martín piensa que Colón es un ejemplo de progreso e innovación.

Una casa de mujeres

María Martín, huérfana de padre cuando no era más que una niña, es la segunda de cuatro hermanas, por lo que no tiene dudas de lo que pueden llegar a hacer las mujeres. Sobre todo, su madre, todo un ejemplo para ella. "Ha sacado a cuatro hijas adelante, con el empeño y la convicción absoluta de que teníamos que estudiar y formarnos para poder volar y ser independientes", se enorgullece la exconsejera. "He sido muy feliz y tengo unos recuerdos maravillosos. Además, estaba rodeada de familiares médicos y farmacéuticos. Y mi madre es enfermera", relata con una sonrisa.

María Martín reflexiona sobre el papel de la mujer en Sanidad y la sociedad.

Ella, por su parte, se decantó por Ingeniería de Montes, una carrera que le ha dejado huella. "El lema de la Escuela de Montes es 'saber es hacer'. Allí forjaron una parte de mi cerebro que luego he ido desarrollando a lo largo de mi vida", reflexiona María Martín, que no se conformó con una titulación. "Ya, siendo más mayor, estudié Ciencias Políticas y de la Administración; y eso abrió en mi mente la ventana de las Humanidades". 

La exconsejera, que nació en Toledo, conoció a su marido en la Universidad. "Trabajaba en una empresa de negocios bursátiles en Madrid, pero me enamoré de un riojano, también ingeniero de Montes, y acabamos trabajando en La Rioja, en gestión pública forestal, la parte más bonita de la carrera", recuerda Martín. 

Tras ocho años trabajando en la Administración, le surgió la oportunidad de dar el salto a proyectos europeos, concretamente, en la Secretaría de Acción Exterior. Y allí empezó a forjar una carrera política que le llevó hasta los mandos de la Consejería de Salud de La Rioja. "Estuve cuatro años y tres meses. Para mí, eso fue muy enriquecedor y todo un privilegio". 

Las distintas caras del feminismo

"El feminismo tiene tantas versiones como personas en el mundo", considera María Martín, que cree que el movimiento debe tener una base integradora. "La mejor forma es que el hombre vaya al lado de la mujer y esté convencido de que (ella) es igual que él. Más que una cuestión de sexo, es una cuestión de neuronas. A nadie con suficientes neuronas se le ocurre pensar que la mujer y el hombre no son iguales", razona.

Martín no participa en las manifestaciones del 8 de marzo porque cree que el camino "recto y seguro" está en la formación. "Suelo participar más en mesas redondas, por ejemplo, de desarrollo de la mujer en el ámbito rural o en la Ciencia", explica la exconsejera, que cree necesario aplicar medidas que favorezcan la conciliación para el cuidado de las personas mayores. "Es un verdadero problema para el que todavía no se ha incorporado ninguna medida de conciliación, denuncia.

"La sanidad es apasionante, conoces a gente con verdadera vocación y una gran inteligencia"

Durante su trayectoria, Martín no ha sido consciente de haber sido discriminada laboralmente por el hecho de ser mujer, aunque sí de haber recibido un trato diferente al de sus compañeros. "A ellos se referían como don Jesús y yo era 'la María'", comenta Martín, de forma anecdótica.

Desde su punto de vista, las generaciones más jóvenes ya están rompiendo los resquicios del machismo. "Las parejas jóvenes no se plantean que uno planche y cuide a los niños y el otro no", reflexiona la exconsejera de Salud de La Rioja, que se ha quedado marcada de su paso por el organismo. 

"La sanidad es apasionante, conoces a gente con verdadera vocación y una gran inteligencia. Es un grupo de gente de la que he aprendido muchísimo, no solo de Ciencias de la Salud, sino de humanidad", confiesa María Martín, que se declara fan de la comedia francesa: "Me parece que tienen un humor divertidísimo e inteligente".

Sin embargo, si tuviera que elegir una ciudad, esa sería Roma. "La tengo especial cariño porque me casé ahí, Italia me parece explosiva", relata a Redacción Médica María Martín, que revela quien es el "rey" de su casa: "Se llama Bor y es un Border Collie, nos encanta pasear con él y hacer excursiones". 

Un momento de la entrevista en la madrileña Plaza de Colón.