A veces, menos es más. Así lo considera el gerente del Hospital de Fuenlabrada, Carlos Mur de Viu, dentro de su política de gestión. “Siempre planteamos aumentar recursos, generar nuevos ingresos, crear servicios o carteras, y generar consultas específicas, pero hay que replantearse realmente si lo implementado hasta ahora genera un resultado en términos de salud”. De lo contrario, considera que habría que cambiar estrategia, ya que “no se trata tanto de sumar sino de redistribuir recursos”.
Durante los últimos dos años, en el Hospital de Fuenlabrada se ha buscado “acometer una política de inversiones o de mantenimiento distinta a la anterior. Es decir, basada en la renovación y en la actualización de muchísimos equipamientos”, indica Mur de Viu. Un proyecto que ha intentado “recuperar una cierta ilusión colectiva o compromiso con la institución, así como un orgullo de pertenencia con la riqueza del centro, que son sus profesionales”. Sin embargo, no han sido las únicas medidas.
“Se ha cambiado y redirigido la política de recursos humanos, mientras que, a nivel asistencial, se afronta cierta ingeniería de procesos para mejorar nuestra accesibilidad al usuario, al ciudadano, tanto en los procesos de citaciones como en la puesta en marcha de distinta tecnología que probablemente está infrautilizada para apalear la lista de espera”, precisa el gerente. De esta manera, recuerda que “las gestión sanitaria, cuando es bien entendida, se encarga de recoger y canalizar los anhelos que vienen de abajo hacia arriba”.
Retos por asumir
Para Mur aún queda mucho por mejorar. “Fundamentalmente, actualizar determinados recursos y realizar un plan de inversiones en el Servicio de Urgencias que, siendo tan fundamental, está tan escaso de espacio”. Al listado suma mejorar el parking y “ante todo, organizar la tarea de la demanda asistencial. Muchas veces no se trata de trabajar más, sino mejor, optimizar el tiempo del profesional".
“También es necesario adoptar, con talante innovador, lo que la tecnología va a aportar y está revolucionando ya en el sistema sanitario”, apunta el gerente basado en su propia experiencia. “Nosotros tenemos un ejemplo muy claro. La población de los municipios de Fuenlabrada, Humanes y Moraleja, tiene poco que ver con la que era hace 12 años, lo estamos viendo por códigos diagnósticos y por motivos de consulta. Por eso, somos nosotros los que tenemos que redireccionar la nave para adaptarnos a lo que nos están pidiendo”.
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