La sanidad a veces deja de lado su norte empresarial. Al menos, así lo considera
Carlos Mur, director gerente del Hospital Universitario de Fuenlabrada, quien ha afirmado en las conclusiones del
VIII Encuentro Global Directivos de la Salud que “se suele olvidar de su ‘core business’ como empresa o sistema, que son los resultados en salud. Muchas veces no los medimos y, en tantas otras, desconocemos qué indicadores crear para lograrlo”.
Mur apunta que esta situación que genera, por ejemplo, que no se puedan comparar los efectos obtenidos entre un área coordinada y otra integrada. Sin embargo, recuerda que, al margen de cuál sea el modelo más eficiente, no se puede perder de vista el objetivo principal: “
garantizar que la población tenga el mayor estado de salud posible, sin que importe dónde está centralizado el poder dentro de las instituciones sanitarias”. En este sentido, invita a romper con el esquema tradicional de los centros.
Carlos Mur, director gerente del Hospital Universitario de Fuenlabrada.
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“El administrador, también en lo sanitario, debe lidiar con el presente. El gestor imagina el futuro, pero el directivo es quien lo crea. Ahora, más que nunca, es necesario
contar con líderes con imaginación que puedan crear soluciones”, reconoce el director gerente del Hospital Universitario de Fuenlabrada. De ahí que recalque “la importancia de dejar de hacer cosas que no están aportando por otras que sí pueden hacerlo. Cada vez es más necesario redistribuir los recursos a través de procesos con confianza y transparencia”.
De esta manera, ha aprovechado las conclusiones del evento para recordar que “
la eficiencia productiva está vinculada a la justicia social, ya que de obtener resultados más distendidos podremos llegar a más esferas de la sociedad”. Asimismo, apunta que será un factor determinante para favorecer “a la integración de las autonomías, eliminar la ausencias de políticas sanitarias para
reducir la presión en los centros de salud y, también, avanzar en un cambio del modelo de financiación del que se ha hablado mucho pero sin concretar nada”.
Carlos Mur, director gerente del Hospital Universitario de Fuenlabrada; Ricardo López, director general de Sanitaria 2000.
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Superar las barreras
La implementación del cambio no siempre es sencilla. Mur ha reconocido que existen importantes barreras para promover un cambio en el sector. Por ejemplo, “sabemos que hay dificultades para incorporar los avances tecnológicos que van a una velocidad vertiginosa frente a unos cambios administrativos que tienen un ritmo inferior”. A lo que agrega las complejidades de lograr
una coordinación mayor sin una historia clínica única, así como “las barreras políticas, el miedo a la ruptura del estatus de los profesionales sanitarios y el reto de promocionar la salud en una población que se siente segura por un estado garantista”.
Para luchar contra estos frenos, el director gerente aboga por el
talento, aunque sabe que “es difícil atraer y mantenerle”, ya que muchos están en el exterior buscando mejores oportunidades. De ahí que recomienda cambiar el paradigma de la contratación actual y
repensar el marco legislativo del área de Recursos Humanos, sin olvidar que muchas veces el talento está dentro de las propias instituciones.
La conclusión ha formado parte del VIII Encuentro Global de Directivos de la Salud, que se ha celebrado en el Parador de Toledo. La cita, organizada por
Sanitaria 2000, cuenta con el auspicio de la Sociedad Española de Directivos de la Salud (Sedisa), así como con la colaboración de
Air Liquide Healthcare, Cardiva, Celgene, Fresenius Medical Care, Gilead y Siemens Healthineers.
La sala durante las conclusiones del VIII Encuentro Global de Directivos de la Salud.
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