Agilizar
procesos,
delegar competencias e integrar a profesionales y pacientes en la
toma de decisiones. Estas son las vías que han conducido al
Hospital del Sureste hacia la excelencia asistencial, bajo la supervisión de
Paloma Casado como gerente del centro madrileño.
Con una reforma del edificio en curso y una población creciente a la que atender, esta médica analista ha conseguido grandes avances en materias de innovación y calidad, como un sistema de
altas precoces o salidas al exterior para pacientes de
UCI. Nos las cuenta una a una en esta entrevista para el pódcast '
Gerencia de Salud'.
¿Cómo resumiría lo aprendido hasta ahora en su primera experiencia como gerente hospitalaria?
Pues es muy difícil de resumir, pero si hay una palabra que caracteriza a este hospital y lo que he podido aprender de todos sus profesionales a lo largo de este año es el compromiso, el sentimiento de marca que llaman ahora, la capacidad de trabajo en equipo y, sobre todo, la orientación al paciente y la familia.
Después de la experiencia en pandemia, que coincidió además con su llegada al puesto, ¿qué retos adicionales añadía la puesta en marcha de las obras del hospital a su trabajo?
Bueno, la verdad es que seguir trabajando en nuestro día a día con las dificultades que tiene este hospital ha sido un reto desde que me incorporé, porque está pendiente una ampliación y por lo tanto todavía tiene unos recursos limitados respecto a la población que atiende, que creció mucho a lo largo los últimos años. Trabajar con esos recursos limitados estructuralmente define mucho la necesidad de reorganizar los procesos asistenciales para que la calidad no se vea mermada. Hemos tenido grandes retos en la urgencia que hemos sabido afrontar con distintos mecanismos, que si bien los gestores hablamos de ponerlos en marcha, a veces resulta difícil. Recursos como la delegación de competencias adicionales a una Enfermería formada para asumirlas, fundamentalmente en la urgencia y en algunas consultas el establecimiento de consultas rápidas en la urgencia que no requieran técnicas ni procedimientos.
Y luego, ha sido fundamental que la urgencia no sea un servicio aislado en este hospital, de manera que todo el equipo está comprometido en generar salud a nuestra población. Tenemos un circuito de altas precoces para poder liberar camas asistenciales y poder ingresar a los pacientes y que no pasen más de 24 horas de espera en la urgencia, y este seguimiento de las altas precoces lo realizamos con una enfermera también formada que sigue en contacto con estos pacientes y puede incluso derivarles a consultas o a las propias Urgencias si es necesario. Son ejemplos de coordinación entre servicios y profesionales, que lo que benefician al paciente porque agiliza el circuito asistencial.
Con todas las dificultades que que tenemos en este hospital, porque la población, como digo, hasta casi 200.000 personas que están censadas ahora en nuestro área asistencial, con unos recursos que estaban pensados para unas 120.0000. Con lo cual, en el momento que se acometan las obras de ampliación del hospital esto quedará equilibrado, pero hasta entonces tenemos que organizar nuestros recursos asistenciales de manera que la calidad no se vea mermada. Yo creo que esa es una de las grandes características de este hospital, el compromiso y el trabajo en equipo. La transversalidad de las actuaciones facilita la agilidad de los procesos y una correcta atención al paciente.
"La transversalidad de las actuaciones facilita la agilidad de los procesos y una correcta atención al paciente".
|
La innovación ha sido una de las guías en su modelo gestor. Un ejemplo fue la creación de la Unidad de Farmacocinética Clínica, que reduce las posibilidades de toxicidad e incrementa la eficacia de los tratamientos. ¿Qué ventajas aporta su puesta en marcha?
Bueno, este es un pequeño gran ejemplo de toda la línea de innovación que pusimos en marcha. Otro ejemplo es el Programa Sureste Innova, que está ya fomentando la innovación en el hospital a todos los niveles partiendo de la propia demanda de necesidades de los profesionales. No se trata de incorporar tecnología o ingeniería de datos que venga de forma externa, sino originada por las necesidades no cubiertas de los propios profesionales y detectadas por esos profesionales. El ejemplo del programa de Farmacocinética parte de eso, de las necesidades de disminuir eventos adversos en cierta medicación y de personalizar los tratamientos estudiando en profundidad la Farmacocinética en cada paciente. Es una personalización de los tratamientos que resulta innovadora, no porque se utilice una tecnología específica, sino porque es verdaderamente una innovación en el proceso asistencial de Farmacia Hospitalaria. Pero además, puedo incluir otro tipo de innovaciones en cuanto a procesos asistenciales: la delegación de competencias de enfermeras es en sí misma una innovación.
El tener un
pull de enfermeras formadas en ciertas competencias que pueden asumir ciertos roles hace que utilicemos mucho mejor los recursos asistenciales y por lo tanto aportemos más valor a nuestras actuaciones en cuanto a innovación de procesos. Tenemos un comité evaluador que decidirá qué retos finalmente se ponen en marcha con el compromiso de la gerencia de asignar los recursos necesarios para que esa idea, ese reto innovador, acabe transformándose en un servicio que podamos adoptar, pilotar y finalmente extender en el hospital y si resulta interesante a otros hospitales del Sermas o a quien quiera copiar nuestras ideas. Creo que es una forma de hacer participar a los profesionales, porque otra de las líneas de trabajo que llevamos desde hace años ha sido la participación de los profesionales en el diseño de todo tipo de procesos y en estas ideas innovadoras que parten de la práctica de la realidad, porque es la única manera, bajo mi punto de vista, de que las innovaciones o las ideas se transformen en realidades y que se puedan luego dar frutos y resultados.
"Tener enfermeras formadas en ciertas competencias hace que utilicemos mejor los recursos asistenciales y aportemos más valor en innovación de procesos".
|
¿Y en qué consiste exactamente esa formación adicional que reciben las enfermeras en este hospital?
La formación para facilitar la delegación de competencias se centra en áreas concretas en las que hayamos detectado una necesidad de optimizar el uso de los recursos. Por ejemplo, en este hospital tenemos enfermeras formadas en Ecocardiografía, de manera que esa tarea la realiza la enfermera, siempre con un cardiólogo consultor al lado, y hay ecocardiogramas que los puede perfectamente realizar la enfermera y destinar el tiempo del cardiólogo a otras tareas. Una serie de técnicas que tradicionalmente se estaban realizando en la consulta de algún especialista y ahora pasan a ser realizadas por las enfermeras. Hemos iniciado también esta línea de trabajo con las matronas para optimizar las consultas de los ginecólogos, porque es una necesidad en este hospital. Es decir, seleccionamos las áreas competenciales que suponen un reto para este hospital en cuanto a la optimización del uso del recurso, fundamentalmente recurso consulta.
Hace justamente un año, este hospital se alzaba como uno de los siete centros seleccionados en toda España y el único de la Comunidad de Madrid para participar en el programa Centros Comprometidos con la Excelencia en Cuidados, de 2022 a 2024. ¿Cuáles considera que son los pilares sobre los que se sustenta la calidad de este centro y que le han llevado a obtener este reconocimiento?
Este centro viene recibiendo reconocimientos en cuanto a la gestión a lo largo de los últimos años. En caso de la Enfermería, el hecho de ser reconocido como centro comprometido con la excelencia, parte de las necesidades detectadas por la Enfermería, es decir, esto no es algo impuesto por la dirección ni muchísimo menos. Es algo que parte de los profesionales y que se impulsa por la dirección. Creemos que la calidad de los cuidados enfermeros en este hospital merece un reconocimiento externo y merece un trabajo extraordinario, que es la implantación de estas guías de práctica clínica. Hemos elegido una serie de guías entre las que yo voy a destacar una que es esencial, que es el abordaje del dolor, ya no como síntoma sino como enfermedad. El dolor ha de ser abordado de una forma integral y multidisciplinar y va ser liderado por la Enfermería en este hospital. Puede tener un efecto impulsor de otras actividades de calidad en otras áreas asistenciales. Entonces, el apostar por la Enfermería como motor de las buenas prácticas en cuidados no es porque sea sólo la Enfermería la que decide hacer esto, sino es todo el hospital en su conjunto que decide trabajar por mejorar la calidad asistencial de nuestros pacientes
Ese camino hacia la humanización de los pacientes se comenzaba a vislumbrar, por ejemplo, al implementar el protocolo de alta precoz, del que ya hablábamos, concretamente en partos, cuando se remodelaron además los paritorios con mejoras mecánicas como lianas para dar a luz de forma natural. ¿Qué beneficios aportan todas estas técnicas?
Este centro está comprometido con el parto natural, todos los cuidados relacionados con el neonato y la madre son una prioridad en este hospital. Si bien es cierto que los partos disminuyeron bastante porque la población va creciendo, no ha sido un impedimento para que mejoremos la calidad asistencial en el parto. De hecho, se instalaron todos los dispositivos necesarios para facilitar el parto natural y que en la medida de lo posible, sea la mujer la que defina su plan de parto de acuerdo al procedimiento que se puede organizar en este hospital. Que sea verdaderamente la mujer la que se empodera con el proceso del parto y no sea el obstetra quien decide cómo ha de nacer esa criatura. Entonces, bueno, pues sí que estructuralmente hemos adaptado el paritorio. También es interesante conocer que en las obras de remodelación tenemos muchas mejoras en cuanto al paritorio también previstas. Ojalá se pueda realizar cuanto antes, pero en la medida de lo posible y dentro de nuestras limitaciones estructurales, facilitamos que las mujeres puedan elegir la forma en la que quieren tener a sus hijos.
Entonces hay que seguir caminando hacia un parto cada vez más natural...
Sí, es que no existe nada más natural que el parto. Por lo tanto, no puede ser de otra manera. Tenemos también un gran reto con nuestros profesionales en disminuir el número de cesáreas consideradas innecesarias. Habría que analizar en cada una de ellas cuáles son las indicaciones que tienen. Yo sé que nuestros profesionales están velando por la salud de las madres y de los niños de forma constante, pero son pasos que estamos dando para mejorar todo lo relacionado con con el parto, el nacimiento, la lactancia materna... Entonces yo creo que no solamente parte de las matronas, sino del equipo de matronas con ginecólogos obstetras y por supuesto con los pediatras, neonatólogos y toda la Enfermería pediátrica, que han de formar un gran equipo que acoja este momento tan natural como es el nacimiento de una persona.
Otra iniciativa, también pionera de su hospital en cuanto a esa humanización de los pacientes, ha sido la inauguración de salidas al exterior para pacientes de UCI. ¿Qué beneficios trae esto para el paciente que habita estas unidades y para sus familias?
Esta ha sido una experiencia que me sigue emocionando cada vez que hablamos de ella. El hecho de que un paciente pueda ver la calle es algo que nosotros como profesionales no valoramos lo suficiente, pero cuando ves la expresión de estos pacientes que salen acompañados por todo el equipo de la UCI, toda la Enfermería y van con un médico de la UCI con todos los dispositivos que necesitan de soporte, cuando cuando les ves salir y ver el exterior, ver un pequeño campo que tenemos aquí delante con unos árboles - es poquito, pero ya no es lo mismo que lo que ven por la ventana- respiran el aire de la calle y además facilitamos que las familias puedan acompañarles en ese momento... Hasta que no lo vivencias, no te das cuenta del impacto que tiene sobre el bienestar emocional de estos pacientes. Está comprobado que mejorar el bienestar emocional en pacientes que están en circunstancias tan extremas como unos cuidados intensivos, mejora y agiliza el proceso de alta, mejora su salud en globa. Todavía no tenemos suficientes casos para poderlo demostrar, pero la literatura científica ya lo ha demostrado y nosotros hemos seguido las indicaciones y nos hemos lanzado a la aventura.
Una de las cosas más curiosas al principio era que cuando salían a la calle les hacía tanto daño el sol que querían cerrar los ojos y dijimos: "pues a lo mejor hay que ponerles unas gafas de sol para salir a la calle, ¿no?" y desde entonces ahí salen nuestros pacientes, con sus gafas de sol que tenemos preparadas para ellos, para que puedan respirar el aire que les proporciona tanto bienestar emocional. Además de estas salidas a la calle, en la UCI hemos implementado también algunas iniciativas innovadoras: en pacientes que tienen mucha dificultad para comunicarse hemos tratado sistemas que funcionan para niños o personas que tienen trastornos del espectro autista a través de tablets y de pictogramas, y conseguimos establecer esa comunicación que también es importantísima para estimular su recuperación neurológica. En la UCI también nos preocupamos de que los pacientes puedan iniciar la fisioterapia desde el momento que están ahí ingresados, en la medida de lo posible, tanto respiratoria como como motora, y eso la verdad es que ya no sólo agiliza las altas y mejora el bienestar físico de los pacientes, sino que a la vez hace importantes mejoras en su bienestar emocional. Son pequeños pasos que parece que nosotros los profesionales vemos como algo que no tiene tanto impacto, y cuando comprobamos el impacto que tiene sobre los pacientes y sus familias, pues nos animamos a seguir en ese camino.
Otra de las apuestas por el progreso ha sido la incorporación de la Eco-Broncoscopia a la cartera de Servicios de Neumología. Se trata de una técnica poco invasiva que ofrece un diagnóstico más detallado de las enfermedades que afectan al mediastino, como por ejemplo el cáncer de pulmón. ¿Qué supone para el equipo contar con esta tecnología
Pues supone que podemos solucionar un diagnóstico tan impactante para los pacientes y tan necesario que se haga de forma local como un cáncer de pulmón, o un despistaje de un cáncer de pulmón. Hasta ahora teníamos que derivar a los pacientes, teniendo en cuenta las listas de espera que existen en otros hospitales, u optar por técnicas más invasivas. Y el hecho de poder tener esta nueva tecnología en el hospital nos da acceso a llevar a cabo el proceso asistencial de una forma más completa. Es decir, acercar el servicio al ciudadano que lo que quiere es que le resuelvan su problema lo más cerca posible, que se lo resuelva el equipo que le ha atendido por primera vez, que es con quien él genera esa confianza, ese compromiso, esa escucha. Todo esto es parte de la humanización: si tenemos que poner dispositivos asistenciales para hacer que nuestros pacientes se sientan más acompañados en un proceso tan difícil como puede ser un cáncer de pulmón, pues nos vamos a embarcar en ello. Tenemos profesionales formados, es una técnica que necesita una formación y una curva de aprendizaje. Y todo ese camino ya lo hemos llevado a cabo. Y bueno, pues hemos apostado por aportar esta técnica a nuestros pacientes para acercarles, en la medida de lo posible, todas las facilidades que podamos en procesos complejos y que no requieren el tener que estar trasladando al paciente a otro hospital.
"Debemos acercar el servicio al ciudadano, que quiere que resuelvan su problema lo más cerca posible."
|
El hospital, además, está inmerso en una campaña llamada 'Sureste' que persigue el diagnóstico y el tratamiento para todos los pacientes con Hepatitis C. ¿Qué carencias hay ahora mismo en el abordaje de esta enfermedad?
La verdad es que me resulta difícil encontrar carencias porque la gestión de la Hepatitis C quizás es uno de los ejemplos en gestión sanitaria que recordaremos a lo largo de los años. No obstante, y una vez ya tratados casi la totalidad de los pacientes que se han ido detectando, hemos hecho una búsqueda activa de pacientes. No se puede llamar cribado porque no lo es, pero sí es una sensibilización a la población de de la importancia de la detección de esta enfermedad y una sensibilización también a todos los profesionales del hospital. Es un trabajo que llevamos conjuntamente con las entidades locales, con ayuntamientos, con las asociaciones de ámbito local para sensibilizar a la población de la importancia de esta enfermedad, de la importancia de su detección y de que es una enfermedad que se cura si tiene un tratamiento. Estamos detectando cada vez menos, afortunadamente, porque es uno de los grandes avances de la de la ciencia en los últimos años, que podamos curar la Hepatitis C. ¿Por qué no vamos a seguir curando pacientes que a lo mejor no conocen que tienen esta enfermedad? Pues ese es nuestro compromiso también.
En esa búsqueda activa que mencionábamos, se han utilizado test rápidos para la detección y el diagnóstico precoz. ¿Qué supone contar con estas posibilidades en la Hepatitis C?
El nacimiento de los test rápidos es un también es un gran avance. Antes teníamos que diagnosticarlo con un análisis de sangre, lo cual consume más recursos sanitarios, pero sobre todo también consume tiempo por parte de las personas, que si no están concienciadas con el impacto de esta enfermedad puede que ni siquiera lleguen a hacerse la detección. El poder disponer de test rápidos hace más accesible y más cercana la posibilidad de la detección a la población en general. Entonces, por ejemplo, el día de la Hepatitis C ponemos un stand en el hospital y a los pacientes que quieran hacerse el test rápido, ahí en el momento se lo hacemos. Mientras están esperando una consulta o mientras están acompañando a un familiar, pueden hacerse el test también. Lo que queremos es un Sureste libre de Hepatitis C y podemos llegar a conseguirlo, sobre todo a través de la sensibilización de la población, y el tener tres rápidos contribuye mucho a la sensibilización.
Su gestión al frente del centro le ha proporcionado muchos reconocimientos a este hospital, y a usted le hizo ser candidata a los Premios Sanitarias de Redacción Médica en 2022. ¿Cree que existe un techo de cristal para las mujeres también en la gerencia de centros sanitarios?
Bueno, el techo de cristal existe para todas las mujeres, en todos los ámbitos sanitarios y no sanitarios. Claro que sí. Es un techo que muchas personas no quieren ver, pero es una realidad. Yo creo que cada vez menos, pero sí que es cierto que las mujeres y los hombres somos distintos, vivimos distinto y tenemos otros valores en algunas ocasiones y, sobre todo, otras prioridades. Existe este techo de cristal, de hecho mujeres que ocupen gerencias en los hospitales de Madrid somos pocas, pero bueno, cada vez más. Creo que gestionamos de una forma distinta, lo cual no quiere decir que sea ni mejor ni peor, es simplemente distinta. Y si eso lleva a obtener buenos resultados, creo que ese techo de cristal se irá rompiendo poco a poco en el ámbito sanitario. Es importante focalizarse en los resultados, no tanto en los procesos, que es en lo que nos hemos venido focalizando hasta hace bien poco. Si no los resultados que se obtienen y verdaderamente visibilizar la acción de las mujeres en niveles altos de la gestión. Yo creo que es un compromiso de todos y por lo tanto quiero aprovechar a agradecer a
Redacción Médica su compromiso también con los Premios Sanitarias, porque creo que hace mucho en la visibilización del talento femenino.
¿Cómo se le da la gestión de equipos? ¿Cree que pasa el examen de directora ojos de los profesionales?
Yo creo que sí, pero bueno, eso lo tendrán que decir ellos, no les he querido preguntar aún, pero bien. Yo lo que intento es siempre mantener la calma. No hay nada, ninguna situación, por muy extrema que sea, que justifique una falta de respeto hacia un compañero ni un comportamiento no coordinado. Entonces, yo lo que intento es el diálogo y que la información sea absolutamente transparente, porque contribuye muchísimo a la gestión. Y no solamente al equipo de la Dirección, sino a todo el equipo del hospital, todos los jefes, supervisores, profesionales... Trabajamos muchísimo por la transparencia, gracias también a nuestro responsable de prensa. Creo que hay que gestionar con transparencia, con diálogo y con escucha, para facilitar que, como digo, este tiempo que pasamos en nuestro trabajo sea mucho más agradable. Creo que al final facilita el tener mejores resultados, indudablemente con todos los aspectos relacionados con la humanización. Preocuparte de que los profesionales, como agentes de humanización, estén trabajando en unas condiciones adecuadas y contribuya a que ofrezcamos lo mejor que tenemos a nuestros pacientes.
Y esto no solamente a un nivel asistencial, sino, por supuesto, en el equipo directivo. Nosotros en nuestro equipo trabajamos de una forma ya no sólo coordinada, sino absolutamente transparente. La base es el diálogo y la base es la comunicación, de manera que absolutamente todas las decisiones, si se analizan en conjunto -indudablemente muchas de ellas tienen que partir de la gerencia o tienen que acabar en una decisión final por parte de la dirección gerente- se hacen a través del diálogo, del análisis conjunto y de la mejor calidad de los datos, que es otra de las líneas de trabajo que sí que me gustaría también destacar de este hospital hilando con la necesidad del trabajo conjunto. En este hospital venimos trabajando desde el inicio en tener los mejores datos para la toma de decisiones, de hecho, estamos trabajando en una mejora del cuadro de mando para que todos los niveles dispongan de los datos actualizados a tiempo real para la mejor toma de decisiones en cada momento.
Esto es muy difícil, se lleva a cabo con muchísimo esfuerzo, pero solamente con el compromiso de todos lo vamos a conseguir y de hecho, lo estamos consiguiendo. Tenemos ya puesto en marcha un cuadro de mando para mejorar los indicadores quirúrgicos y vamos a lanzar ahora otro para mejorar el rendimiento de las consultas, es decir, no solamente datos de gestión, sino también puesta a disposición de los profesionales todos los datos que necesiten para realizar estudios, incluso de investigación o cualquier tipo de análisis para la mejora de los procesos asistenciales. Recientemente hemos incorporado también a los pacientes en nuestro análisis de procesos con una experiencia que ha empezado de una forma muy humilde en el área de Dermatología. Queremos continuar con Farmacia y esto no puede ser posible si no tienes un gobierno de datos estructurado y una calidad del dato que te permita en todo momento la toma de decisiones.
¿Qué papel pueden jugar los pacientes en las tomas de decisiones de un hospital?
Siempre he defendido la participación del paciente y aquí estamos trabajando en ello. Es complicado, porque en muchas ocasiones tenemos claro lo que hay que hacer, tenemos clara la estrategia, pero como decía Peter Drucker: "la cultura se come a la estrategia en el desayuno", de manera que lo que estamos haciendo ahora mismo es operar los cambios culturales necesarios para ir integrando a la toma de decisiones a los distintos niveles. Uno de los ejemplos es un análisis del proceso asistencial en Dermatología que hemos hecho conjuntamente con los pacientes. También tenemos a los pacientes trabajando conjuntamente con nosotros en ciertas innovaciones que ellos nos han propuesto, y en la creación de un comité de pacientes más formal.
Actualmente hemos ido trabajando en pequeños ámbitos para que todo esto vaya calando como una lluvia fina en nuestros profesionales, y cuando ya tengamos formado nuestro comité de pacientes formal, podamos hacer que esas actuaciones partan directamente de ahí. Pero hasta ahora las actuaciones parten, digamos, de la colaboración de profesionales con pacientes y van un poco desde abajo hasta arriba. Si no cambiamos la cultura poquito a poco, por mucho que desarrollemos una estrategia de participación desde arriba, vamos a conseguir muy poquito. Lo primero que tenemos que cambiar es nuestra propia mentalidad como profesionales, integrando al paciente no solamente en los grupos de trabajo como he expuesto, sino en la propia consulta, es decir, en la toma de decisiones, de implantar una verdadera toma de decisiones compartida para que el propio paciente sea autónomo en todas y cada una de las decisiones que competen a su vida. Y en la relación con la patología que padece y que en algunas ocasiones impacta también a la familia.
"Tenemos que cambiar nuestra mentalidad como profesionales integrando al paciente en los grupos de trabajo y en las decisiones de consulta para que sea autónomo en su propia salud".
|
¿Qué aspectos siguen siendo hoy los más complicados de su trabajo?
Aquí no hay nada que sea fácil, lo que pasa es que las cosas hay que hacerlas sencillas y facilitar que las intervenciones se puedan poner en marcha. El verdadero reto es trabajar por esa asistencia sanitaria basada en valor, y esto pasa por una orientación a resultados. Yo creo que de esa frase parten muchísimas cosas. Y otro reto grandísimo que tenemos, y esto no es sólo de este hospital, sino es de la asistencia sanitaria en general en nuestro país, es la fidelización de los profesionales con la escasez actual que hay de profesionales, que en este hospital tiene otra dificultad añadida: está a 25 kilómetros de Madrid. Es un hospital que cuando los profesionales lo conocen y precisamente por esa transversalidad en la forma de funcionar, deciden quedarse con nosotros. Pero un reto no deja de ser la fidelización de nuestros profesionales. Yo creo que con estos dos grandes retos y lo que nos venga, podremos seguir trabajando para ofrecer a nuestros pacientes y sus familias lo mejor que tenemos, que es nuestro conocimiento, nuestra experiencia y nuestra humanidad, que es la esencia de nuestra profesión.
Esos retos llevarán detrás unas líneas de actuación. ¿Cuáles son exactamente?
Como digo, fidelizar a los profesionales no pasa solamente por generar un ambiente de trabajo adecuado, sino pasa por una formación que parta de sus propias necesidades, conjugada con las necesidades que tenga del hospital. Parte de un reconocimiento de los profesionales, de hecho hemos lanzado unos reconocimientos a los profesionales que se llaman Compromiso Sureste y Excelencia Sureste, en los que vamos a reconocer y recompensar de manera conjunta a aquellos profesionales que demuestran un mayor compromiso con los pacientes dentro de los valores del hospital de la cercanía, el respeto, la humanidad y la atención centrada en la persona. Eso, por una parte. Luego vamos a hacer unos reconocimientos a la excelencia en ámbitos de investigación, calidad, innovación, desempeño profesional... A lo mejor parece una iniciativa de poco impacto, pero creo que una persona que sienta recompensado su trabajo en un reconocimiento que sobre todo parte de sus compañeros y en los otros casos que parte de la dirección puede estimular mucho a la fidelización de los profesionales.
Obviamente en el sistema público tenemos muy poquitas armas para recompensar económicamente a los profesionales, pero sabemos que la que la motivación de los que nos dedicamos a una profesión sanitaria no es fundamentalmente económica, es mucho más trascendente. Y en esa medida es en la que hemos sacado estos reconocimientos, es decir, formación, reconocimiento profesional, transparencia, información y, por último, la participación de los profesionales. Tener en cuenta las iniciativas que parten de los profesionales para, por ejemplo, la innovación. Otra línea es toda la participación de los pacientes, y la tercera es la orientación a resultados basada en la excelencia del dato. Es decir, todo lo que estamos hablando de asistencia sanitaria basada en valor, no solamente orientación a resultados, sino uso adecuado de los recursos.
Y ahí está la reorganización de los procesos asistenciales, haciendo, por ejemplo, delegación de competencias en Enfermería y optimizando el tiempo en consulta, por ejemplo, optimizando el uso de ciertos recursos tecnológicos o estructurales como pueda ser el quirófano, impulsando actuaciones fuera de quirófano o actuaciones incluso fuera del hospital. Y la última línea es estimular la innovación y la investigación, que también es un estímulo para trabajar en la fidelización de los profesionales. Todo ello con capas transversales que viene trabajando este hospital desde que nació, que es la calidad, la seguridad del paciente, la humanización y, por supuesto, la comunicación y la transparencia que constituyen la base de nuestro trabajo diario.
"Fidelizar a los profesionales pasa por ofrecerles una formación acorde a sus demanadas y a las necesidades del hospital".
|
De cara al futuro, ¿qué cambios serían los más próximos que llevar a cabo?
Estamos hablando mucho del hospital y de los procesos internos y realmente lo que tienen que hacer los hospitales es salir fuera. Este hospital viene trabajando en la coordinación sociosanitaria desde hace años. Venimos trabajando en la coordinación, en la continuidad asistencial con Atención Primaria desde hace también muchos años, pero creo que a eso le falta un pasito más y es que el hospital salga fuera, no que salgamos fuera a todos los profesionales, sino que el hospital quede integrado en el área como un ente más, en coordinación con, por ejemplo, entidades locales para desarrollar procesos que generen salud en la población. Y esto es especialmente importante en un hospital que atiende a población muy rural como es este; atiende a dos núcleos urbanos grandísimos como son Arganda y Rivas, pero a 21 poblaciones que en algunos casos se encuentran a dos horas de distancia del hospital. El hecho de que el hospital se encuentre presente en un trabajo coordinado con las entidades locales hará que nuestros procesos no se centren solo en el hospital, sino que abarquen a la persona allí donde se encuentra. Creo, considero, que puede aportar muchísimo valor a la asistencia sanitaria y creo que es un gran reto en el que ya hemos empezado a trabajar con algunos ayuntamientos, eso que llaman algunos el hospital líquido. Creo que ha de ser una realidad.
Por último, a modo de resumen, ¿qué cualidades diría usted que debería tener un buen gestor?
Para empezar tiene que ser una buena persona, esto en cualquier ámbito de la vida te facilita el trabajo. Creo que es fundamental tener una visión estratégica para poder trasladar y alinear los objetivos y el funcionamiento del hospital con las líneas que marcan la Consejería y el Sistema Nacional de Salud. Esto es muy importante y no siempre lo tenemos claro. El tener esa visión estratégica no es lo único, porque además bajar a la práctica en un centro, en un sistema tan complicado como es un hospital, requiere otras habilidades personales como son la capacidad de escucha, el respeto, la capacidad de gestionar equipos, de solucionar conflictos... Dar a los equipos el propósito del centro, el propósito que es mucho más que una visión. Conjuga muchas cosas además de la visión, los propios valores que compartimos en el centro. Gestionar por valores es algo que de lo que estamos hablando siempre. No hace muchos años que hablamos los gestores, pero saber hacerlo requiere tener esa escucha activa a las emociones de las personas con las que estamos trabajando. Realmente lo que nos mueve a los seres humanos son las emociones, como su propio nombre indica, emotivo. Y si eso no lo tienes claro, no vas a poder llegar a desplegar la táctica necesaria para alinear esa estrategia y no vas a poder nunca generar ese cambio cultural que necesitas para realizar esas intervenciones que haga que el hospital se adapte con flexibilidad a cualquier reto en la asistencia sanitaria que se nos que se nos pueda presentar, porque hace tres años ya comenzó una pandemia, pero no es el único reto ni el más difícil que vamos a tener que afrontar ahora mismo.
Suscríbete a todos
'Los Pódcast de Redacción Médica' en
iVoox,
Spotify y
Google Podcast.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.