Cada año España suma unos 25 médicos especialistas en
cirugía cardiovascular. Un número de plazas que, según los expertos, no responde a la necesidad actual del sistema de salud, el cual carece de otras especialidades más demandadas como Medicina de Familia y Pediatría.
Es tal el número de especialistas que cada año se forma que muchos de los estos acaban yéndose fuera de España por
falta de plazas en los hospitales nacionales. Así lo recalca el presidente del Colegio de Médicos de Sevilla,
Alfonso Carmona, quien señala a
Redacción Médica que “no se pueden estar formando cirujanos cardiovasculares
para que se vayan al paro, es increíble perder tiempo y dinero en formar a gente que no es necesaria, más cuando necesitamos a cientos de otras especialidades como
Pediatría, que sí son muy demandadas pero, concretamente, la
cirugía cardiovascular no”.
A esta postura se suma
Carlos Infantes, cirujano cardiovascular,
actual presidente de la Academia de Medicina de Sevilla y miembro de la
Comisión Nacional de las especialidades del Ministerio de Sanidad durante más de 30 años. Según destaca Infantes “la génesis de este problema es muy antigua”, remontándose
a hace más de 20 años, cuando la especialidad se encontraba entre las más demandadas y las decisiones políticas abogaban por
"crear servicios de cirugía cardíaca en todas las provincias".
Este alto número de especialistas se enfrenta a un número cada vez más
reducido de operaciones que exigen la presencia de los mismos. De este modo, como expone Infantes “si partimos de que un servicio está formado por 4 especialistas en cirugía cardiovascular, 2 jefes de sección y un jefe de servicio,
esto hace 7 especialistas en cirugía cardiovascular. Si el número de extracorpóreas de un servicio mediano es de unos 250 operaciones anuales, esto significa que el máximo es de unas 42 operaciones por facultativo. No puede ser un gran especialistas el que
solo puede hacer unas 40 operaciones al año”.
Una situación que deriva así no solo en el envío “al paro” de estos especialistas, sino que afecta a la
calidad y ejecución del trabajo de los que ya ejercen. Todo ello lleva a ambos representantes a destacar que, desgraciadamente,
“sobramos, no hay suficientes casos para operar”, siendo clave la intervención de las autoridades políticas para "reducir el número de esta categorías en favor de las que sí hacen falta de forma urgente”.
Posibles soluciones ante el superávit de especialistas
El origen del problema de superávit de ciertas especialidades está ligado al
desconocimiento del número de profesionales sanitarios que ejercen en España. Así, en palabras de Alfonso Carmona “hay que saber exactamente cuál es el déficit de especialistas que hay en España y cuál es el superávit, con una
proyección de mínimo a 5 o 10 años, y así es como se deberían lanzar las plazas vía MIR”.
De este modo, es el Ministerio de Sanidad quien debe dar el primer paso para regular el
registro de profesionales y atender la verdadera demanda en cada una de las categorías. “Los colegios podemos saber por la edad de los colegiados cuántas jubilaciones se proyectan, pero no tenemos el
conocimiento de dónde y cómo ejercen los facultativos, un dato que si se obligara a dar permitiría tener una visón real de qué especialidades son las más necesarias a largo plazo”, subraya Carmona, quien además reitera que esta demanda lleva años encima de la mesa de Sanidad.
A este control Infantes suma la posibilidad de
unir los servicios de cirugía cardiaca. Así, debido a intereses políticos se ha tendido a “duplicar los servicios para llenarlos de especialistas”, un proceso que afecta al
número de operaciones que llevan a cabo los especialistas y que podría solucionarse “concentrando los servicios” y permitiendose de este modo que los facultativos puedan aumentar el número de operaciones y la calidad de las mismas.
Médicos extracomunitarios para solventar el déficit de especialistas
Frente al superávit de cirujanos cardiovasculares, los médicos denuncian la falta de otras especialidades demandadas en todo el territorio nacional. Un número de especialistas que va en decrecimiento debido al
incremento de las jubilaciones y que se estaría cubriendo con
facultativos extracomunitarios.
“Estamos contratando especialistas de otros países mientras que
exportamos los nuestros”, recalca Carmona. Una situación que derivaría de
falta de conocimiento de la estructura real del sistema de salud que viene siendo denunciada por los Colegios de Médicos sin que “se nos haga caso”.
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