No ha habido grandes sorpresas en el
examen MIR 2018. El contenido ha sido equilibrado y "bastante convencional", y la mayor dificultad ha estado en algunas de las
imágenes de electrocardiogramas, varias radiografías y TAC abdominales poco claros y algunas láminas sin preámbulo clínico, según han informado aspirantes MIR a
Redacción Médica.
De acuerdo con estas fuentes,
el examen ha sido "asequible para quien se ha esforzado", incluso con algunas preguntas de respuesta fácil y directa "que todo el mundo tendrá bien", por lo que ha continuado en la línea de lo que ya se vio en el MIR 2017. Por este motivo, los aspirantes a
médicos internos residentes creen que este año la
nota de corte subirá, porque "la mayoría de resultados van a ser similares".
En cuanto a las
impugnaciones, no parece que vaya a haber muchas preguntas que vayan a ser reclamadas, ya que han sido "muy directas", por lo que los aspirantes creen que no habrá más de 4 o 5 instancias de este tipo.
Psiquiatría, el bloque más sencillo
Daniel Orts, uno de los aspirantes a los que ha tenido acceso
Redacción Médica, ha explicado a este periódico que
Psiquiatría ha sido el bloque que menor dificultad ha revestido en este examen, aunque ha aclarado que es la especialidad con la que tiene más afinidad, por lo que su opinión puede no corresponderse con la percepción de sus compañeros.
En cuanto a las preguntas, Orts ha destacado que tampoco ha habido grandes sorpresas, con un equilibrio entre unas más difíciles y otras más fáciles, y sólo alguna más intrincada, aunque estas han sido las menos.
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