Hiedra García Sampedro / Imagen: Cristina Cebrián. Madrid
La secretaria de Estado de Educación, Monsterrat Gomendio, ha comparecido en la Comisión de Educación y Deporte del Congreso de los Diputados donde ha reiterado la necesidad de iniciar un debate sobre la financiación de la universidad y las facultades, ya que existe una “tensión obvia, que no puede seguir así”. Pero ha recalcado que el Ministerio de Educación “no tiene ninguna solución ni propuestas concretas”.
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La secretaria de Estado de Educación, Montserrat Gomendio, (en el centro) ha comparecido en la Comisión de Educación y Deporte.
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“Debemos decidir qué porcentaje paga el usuario y qué parte el contribuyente”, asegura Gomendio, quien subraya que la financiación pública de la universidad “es altísima”. Ha explicado además que es necesario un modelo intermedio, no de extremos como los de Estados Unidos, “donde la mayor parte la paga el usuario”, o de los países nórdicos, “que tienen una carta impositiva muy alta”. “En otros países se ha sumado un sistema complementario de préstamos que en España no tenemos”, subraya Gomendio.
Según los decanos de Medicina, ellos son partidarios de que parte de esa financiación se establezca según unos objetivos que sean acordados previamente para mejorar el modelo y critican que el sistema “no sea homogéneo” porque depende de las comunidades autónomas que han visto recortados sus presupuestos. El presidente de los decanos de Medicina, Ricardo Rigual, está de acuerdo en que es necesario dedicar más recursos para la universidad y en especial para las facultades de Medicina, aunque esto no es suficiente, ya que hace falta un “mejor aprovechamiento y eficiencia en el gasto de los presupuestos.”
España ha sido el país de nuestro entorno que más aumentado las tasas de matriculados en la universidad en menos tiempo. Según Gomendio, esta situación, unido a que los rangos de tasas “son inferiores”, a que el número de becarios es alto, “superior al 20 por ciento”, y a que no hay sistema de préstamos, “está creando una tensión obvia, que no puede seguir así”.
Sin embargo, Gomendio se lamenta de que la inversión en la universidad no supone “una ventaja en términos de empleabilidad”. En este sentido, el diputado de UPyD, Carlos Martínez Gorriarán, ha señalado que “no es cierto que la universidad produzca parados” y ha comentado que “el beneficiario” de una formación superior de calidad “es el país”.
Ante la normativa que da la posibilidad a que las universidades reduzcan sus titulaciones a tres grados, la diputada del Grupo Mixto Rosana Pérez Fernández, ha criticado que antes de ponerse en marcha “no se haya evaluado la implantación de Bolonia”. Sobre este proyecto, Martínez Gorriarán ha señalado que su creación “responde al ahorro del déficit público”. “Se pretende retirar la financiación pública a la universidad”, según el diputado de UPyD.
Creación del Colegio de Pedagogos y Psicopedagogos
Los grupos parlamentarios han aprobado por unanimidad el Proyecto de Ley por el que se crea el Consejo General de Colegios Oficiales de Pedagogos y Psicopedagogos. La constitución de este organismo responde a las exigencias de la Ley de Colegios Profesionales.
Según ha comentado el diputado del Grupo Catalán, Martí Barberá, la profesión de pedagogo y psicopedagogo ha traspasado el “ambito educativo para extenderse al sanitario o el social”. Barberá asegura que estos especialistas son “una pieza clave en los servicios a la sociedad”. Ha recordado además que en Cataluña existe uno de los tres colegios autonómicos, los otros son los de la Comunidad Valenciana y el de la Islas Baleares, y que la creación del Consejo General servirá para “que se coordinen y puedan defender la profesión”.
María Jesús Moro, del Grupo Parlamentario Popular, ha señado que “este ámbito ha crecido a través de las transformaciones de los títulos que se produjeron con el Espacio Europeo de Educación Superior”.
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