Un estudio publicado en el
Journal of the American Heart Association alerta sobre un grave déficit en la educación médica: solo uno de 159
estudiantes sabe realizar correctamente todos los pasos para tomar la
presión arterial a un paciente de forma idónea.
Si bien el estudio tiene limitaciones, pues los propios autores admiten que es una muestra pequeña, sí que llama la atención las lagunas en el desempeño de una prueba básica y esencial.
Los estudiantes que participaron en el estudio fueron aquellos que acudieron a la
Reunión Anual de la Cámara de Representantes de la American Medical Association, cuando los autores aprovecharon para retarlos a realizar una medición de la presión arterial con un paciente simulado.
Solo uno de los 159 estudiantes realizó bien los once pasos examinados, siguiendo las recomendaciones actuales de la American Heart Association. De media, los estudiantes hicieron de forma correcta 4,1 tareas.
Más de la mitad de los estudiantes colocó el
esfingomanómetro en el brazo desnudo y usó un tamaño correcto de dispositivo; otras tareas que hizo correctamente la mayor parte de estudiantes fue apoyar el brazo y pedir al paciente que descruzara las piernas y no hablara durante la toma.
Sin embargo, menos de la mitad se aseguró de que los pies del paciente estaban completamente apoyados en el suelo, o le pidió que no leyera o usara el teléfono móvil durante la toma. La mayoría tampoco tomó la presión en los dos brazos, apuntó el brazo que dio una lectura mayor e indicó qué brazo tomar para futuras mediciones. Muy pocos -tan solo once- hicieron al paciente esperar cinco minutos antes de la toma, algo que ayuda a asegurar que la actividad previa del paciente no ha elevado la presión.
A pesar de que no tiene significación estadística, los autores llaman la atención sobre el hecho de que se trataba de estudiantes procedentes de escuelas de Medicina de 37 estados, por lo que consideran que este problema está muy generalizado.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.