El examen MIR 2024 arranca con optimismo tras una noche "sin dormir"

Hoy es el día. Después de afrontar largos meses de presión, estudio intenso e incertidumbre, ha llegado el momento de enfrentarse a las pruebas de Formación Sanitaria Especializada de 2024. En esta ocasión, más de 30.000 aspirantes en todo el país se examinan este sábado de las distintas pruebas, concretamente 13.996 médicos que sueñan con bordar este duro examen MIR 2024 para lograr su plaza deseado. Familiares y amigos han querido acompañar a las puertas del examen a aquellos candidatos y candidatas que, a pesar de los nervios, no han dudado en mostrarse optimistas para hacer frente a las cuatro horas y media de examen que tienen por delante.

Al igual que en anteriores convocatorias, Redacción Médica, además de informar del minuto a minuto de la jornada MIR, se ha desplazado hasta la Universidad Complutense de Madrid para conocer de primera mano las primeras reacciones de los aspirantes una vez llegan a las puertas de la facultad en la que realizarán su prueba. Un camino que, aunque hoy es el decisivo, ya han recorrido aquellos que hace una semana se presentaron a los simulacros presenciales, algo que les ha "quitado el miedo" al MIR 2024. Berta Bermejo, una de las aspirantes a esta prueba, ha asegurado a este diario, en la entrada de la facultad de Derecho, que llega "más tranquila de lo que pensaba" y lista para darlo todo en el examen.

Sabina Aranda, otra aspirante al MIR 2024, llega optimista y convencida de que el examen le irá bien. "Sobre todo porque la academia nos ha preparado muy bien y el futuro de un médico siempre es esperanzador. Tenemos siempre mucho que aprender y nos han ayudado mucho en esta etapa. He disfrutado mucho del proceso, con optimismo y resiliencia que es lo que me recomendaron desde el principio, y con calma. La clave es confiar en ti misma y saber que el trabajo que haces día a día va a ser productivo" asegura.

"He creado una playlist con música motivadora para pensar lo menos posible de camino al examen"

El examen EIR 2024 también llega esta tarde. Rocío, una de las enfermeras que se presenta a la prueba, explica que esta mañana se lo ha tomado "con calma" para que su cabeza no le jugara una mala pasada. "He desayunado y he comido algo muy ligero, y he estado toda la mañana repitiéndome a mí misma muchas frases realistas, sobre todo lo que he trabajado, el camino que llevo, que he dado lo máximo que estaba en mi mano, para aumentar mi confianza porque así hay que ir a un examen", reconoce.

Como curiosidad, Rocío se ha preparado una playlist con "música motivadora" para escuchar en el camino del examen e incluso cuando esté esperando al inicio de la prueba: "Estamos esperando de 15:00 a 16:00 dentro y puede ser interminable, así que la música me va a hacer pensar lo menos posible porque podemos entrar en un bucle que no interesa".

¿Qué esperan que caiga en el MIR 2024?

Los aspirantes antes de entrar al examen tienen claras sus preferencias. Las especialidades que más se han nombrado antes de dirigirse a las aulas del examen han sido Pediatría, Infecciosas o Endocrinología, entre las favoritas para ser preguntadas. Otras opciones están en preguntas relacionadas con el cáncer de pulmón, algo que Sabina lleva "muy preparado", pero también tiene en mente las temas "más actuales" que suelen aprovecharse cada año en la prueba MIR para introducir alguna pregunta actual y novedosa.

"Me encantaría que entrase algo relacionado con diabetes, que ahora es como 'trending topic'. También la hipertensión arterial, en general los factores de riesgo cardiovascular están muy al día. Además, los tratamientos biológicos que nos hacen estudiarlos mucho y las terapias más innovadoras confío en que tengan algún hueco en la prueba", insiste.

Nervios y ansiedad, la cara B del día MIR

No todo es optimismo e ilusión. Hay quien ha pasado una "noche complicada" ya que los nervios, en una situación así, pueden jugar una mala pasada. En el caso de Carlos Lázaro, aspirante al PIR, ha reconocido momentos antes de la prueba que no ha podido dormid muy bien, debido a la ansiedad, en parte también por no ser su primera vez presentándose al examen. "Cuando vas acumulando convocatorias duermes peor porque te preguntas si otra vez este no será el año, no sabemos lo que nos vamos a encontrar, si te quedas en blanco... Te vienen a la cabeza mil nombres y mil conceptos. Sé de compañeros que se han pasado la noche llorando, con mucha ansiedad y que han dormido poco", explica.

La suerte está echada. Por delante quedan ya cuatro horas y media ininterrumpidas de examen en las que sólo les queda tratar de plasmar el trabajo realizado durante meses, e incluso años, pero sabiendo que siempre habrá una nueva oportunidad si no sale bien.