Quedarse
embarazada durante la
residencia no es fácil, y así lo revela una
encuesta estadounidense realizada a
347 cirujanas generales que tuvieron uno o más embarazados durante esta fase. Entre los factores que dificultaron su situación, las mujeres participantes resaltaban el
estigma asociado a la gestación durante el periodo de formación y una lactancia y apoyo al cuidado del bebé inadecuados. Todos estos y otros factores se traducen en que un 39 por ciento de las participantes
consideraron, de manera seria,
dejar su residencia, mientras que el 30 por ciento confesaron que no recomendarían a una estudiante de Medicina derivar su carrera hacia la
Cirugía General.
El estudio, que ha sido publicado en
Jama Surgery, se ha hecho a partir de una encuesta que incluía
74 preguntas que fueron distribuidas electrónicamente a miembros de la Asociación de Mujeres Cirujanas, de la Asociación del Programa de Doctores en Cirugía y en redes sociales. Fueron incluidas las cirujanas que tuvieron al menos un embarazo durante el programa estadounidense de residencia de Cirugía General que hubieran completado su formación en el año 2007 o posteriormente.
El estudio incluyó a 347 cirujanas con una
media de
30,5 años que habían tenido, entre todas,
452 embarazos. Un total de
297 mujeres (85,6 por ciento)
trabajaron sin modificar su
horario hasta el nacimiento del bebé, mientras que
220 (63,6 por ciento) estaban
preocupadas por que su horario de trabajo
afectara de forma negativa a su
salud o a la del
bebé.
Falta de apoyo a la lactancia
Además,
251 mujeres (78,4 por ciento) solicitaron una
baja por maternidad de 6
semanas o menos, y 250 (72 por ciento) percibieron que la duración de esta ausencia era inadecuada. Asimismo, la
lactancia fue considerada como
importante para 329 de las residentes (95,6 por ciento), pero
200 (58,1 por ciento) tuvieron que
detenerla antes de lo que deseaban debido a un acceso deficiente a las instalaciones de lactancia y a los desafíos que suponía salir de la sala de operaciones para extraer la leche.
El 29% de las encuestadas no recomendarían Cirugía General a mujeres
|
Sesenta y cuatro mujeres (18,4 por ciento) contaban con
apoyo institucional para el
cuidado de sus hijos, y
231 (66,8 por ciento) mostraron su deseo de que hubiese una mejor conciliación entre la carrera quirúrgica con la maternidad y el embarazo. Un total de 135 (39 por ciento) consideraron de manera muy seria abandonar la residencia en Cirugía General, y
102 (29,5 por ciento)
desanimarían a las estudiantes de Medicina a que realizasen una carrera quirúrgica, específicamente por las dificultades de
equilibrar el embarazo y la
maternidad con la formación.
"El estudio actual encontró que las mujeres que tienen hijos durante la residencia pueden tener un riesgo particularmente alto de
deseo de
abandonar la residencia. Las diferencias en las prioridades entre hombres y mujeres pueden explicar que exista un mayor riesgo de
desgaste entre las madres primerizas y que las cirujeras inviertan casi el doble de horas -perdiéndose más actividades laborales- en sus obligaciones maternales que sus compañeros masculinos", aseguran los autores del estudio.
Discriminación de género
Los autores también recalcan que, aunque casi la
mitad de los graduados de las facultades de Medicina estadounidenses son
mujeres, ellas son menos propensas a elegir Cirugía General. "Las causas de esta discrepancia de género incluyen la
falta de modelos femeninos, la
discriminación de género y las
preocupaciones sobre el embarazo y el cuidado de los niños", explican.
"Los
múltiples desafíos a los que se enfrentan las residentes de Cirugía General embarazadas pueden influir negativamente en la
satisfacción profesional, por lo que deben abordarse para atraer y retener a las sanitarias más
talentosas", consideran los autores.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.