Guillermo González,
número 1 del examen MIR en 2014, no ha vuelto a presentarse al examen MIR ni por ‘hobbie’ ni por
deporte, aunque reconoce que este tipo de pruebas se le dan
“muy bien”. Aun así, este curso ha contado con la ayuda de sus profesores de la
Academia AMIR, los cuales "me han facilitado bastante las cosas". Cinco años después de conseguir una plaza, su objetivo volvía a ser el mismo en esta convocatoria:
pelear por la especialidad MIR que más le llena como profesional.
"A mi familia lo cierto que no le hacía gracia que volviera a empezar la residencia MIR"
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En aquel entonces, él inauguró los actos de asignación de plazas MIR como número 1 eligiendo
Dermatología en el Hospital La Paz. Este año, en cambio, le tocará pulsar la tecla que le otorga una nueva plaza MIR detrás de
José Manuel Busto, número 1 del MIR de 2019. Y esta vez lo tiene muy claro:
“Quiero hacer Anatomía Patológica”.
“Durante la residencia la Dermatología se aprende mucha
Anatomía Patológica, y llegó un momento, en tercero de residencia, en el que me di cuenta de que me gustaba más esa especialidad que la que estaba haciendo”, explica
González a Redacción Médica.
No hay una receta mágica
Durante el último año, González ha alternado su trabajo como adjunto en el hospital La Paz con la preparación del examen MIR en la
academia AMIR. De primeras reconoce que no ha sido una tarea sencilla, pero señala que detrás
“hay mucho esfuerzo personal”
“La preparación ha sido muy parecida a cuando me presente en 2014. El método es el mismo. Pero por cuestiones de trabajo no he podido ir a las clases de la academia, aunque si he hecho muchos simulacros y he tenido la ayuda de los profesores, los cuales
me han facilitado bastante las cosas y el trabajo”, señala González.
Cuándo se le pregunta por su receta para ser número 1 y ahora número 2 del MIR, González ríe y responde que
“no hay ninguna receta mágica que avale mi trabajo”. “Tengo que reconocer que en mi caso se me da muy bien hacer este tipo de exámenes. Ojala se me diera tan bien hacer otras cosas.
¿Mi secreto? Hacer un plan de estudio adecuado, estudiar todos los temas, dando prioridad a las asignaturas más importantes, y conocer y detectar mis fallos para posteriormente corregirlos”, enumera.
"Es mi decisión"
El que es ya especialista en
Dermatología explica que la decisión de hacer otra especialidad no ha sido fácil, y la mayoría de las personas de su entorno sigue sin entender muy bien el porqué. “Esta decisión la he tomado yo solo. A mi familia lo cierto que no le hacía gracia que volviera a empezar la residencia.
Es mi decisión, y creo que la tomo en el mejor momento”, asevera González.
Su historia pasaría desapercibida si no hubiera sido porque ha conseguido ser la segunda mejor nota del examen
MIR, justo cinco años después de haber conseguido la mejor. Por lo demás, prosigue, “hay muchos casos como el mío. Especialistas que deciden volver a presentarse al
MIR para conseguir otra especialidad”.
En esos casos,
Guillermo González ya sabe que volver a ser R1 va a ser bastante duro,
“sobre todo desde el punto de vista económico”. Aun así su ánimo no decae y afronta esta nueva etapa formativa como el “hermano mayor” de sus futuros compañeros.
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