Cómo no equivocarse al elegir especialidad MIR

Hasta ahora no se ha percibido un continuo en la formación médica, sino que se ha abordado de forma parcelada, según explican los profesionales

Domingo, 12 de abril de 2015, a las 20:04
Hiedra García Sampedro / Ricardo Martínez Platel / Imagen: Cristina Cebrián y Miguel Fernández de Vega. Madrid
Los aspirantes a médico residente que hicieron el examen MIR en enero acudirán este miércoles 15 de abril a la sede del Ministerio de Sanidad para elegir especialidad y unidad docente. En los últimos años suelen repetirse las mismas disciplinas en la elección de los primeros y son varios los factores que intervienen. Profesionales reunidos por Redacción Médica han explicado cuál es la situación en sus especialidades y su visión sobre el modelo de formación sanitaria especializada.

Fernando Malmierca, vicepresidente de la Asociación Española de Pediatría (AEP); Fernando Carballo, vicepresidente de la Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas (Facme); Hiedra García, redactora de Sanitaria 2000; Juana Sánchez, coordinadora del Grupo RYJE de la SEMG; Adrián Alegre, jefe de Servicio de Hematología del Hospital La Princesa de Madrid; César Casado, secretario general de la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (Secpre).


Fernando Malmierca, vicepresidente de la Asociación Española de Pediatría (AEP): La situación de la Pediatría es boyante, a pesar de las pegas existentes en sanidad y en el terreno de la formación. Defendemos que los niños sean atendidos por pediatras, en Atención Especializada y Primaria. Pero necesitamos capital humano y la Administración no está en esa línea y según está siendo tratada la Pediatría, puede tener una situación futura delicada.

Fernando Carballo, vicepresidente de la Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas (Facme): Nosotros vamos más allá de los conflictos de intereses entre especialidades en los que Facme actúa como foro común. Defendemos la bondad del sistema MIR, pese a que existen problemas como la discontinuidad entre grado y posgrado, y al estudiante le falta una visión del conjunto de las disciplinas. En Digestivo, mi especialidad, vivimos una situación de inicio de paro.

Fernando Malmierca, vicepresidente de la Asociación Española de Pediatría (AEP).

Adrián Alegre, jefe de Servicio de Hematología del Hospital La Princesa de Madrid.


Juana Sánchez, coordinadora del Grupo de Residentes y Jóvenes Especialistas (RYJE) de la SEMG: Familia es la gran desconocida para los estudiantes. Pocos de los primeros en elegir plaza la escogen y la mayoría opta por otras especialidades. Por esta razón, queremos entrar en la Universidad. Otra de las cuestiones que debemos abordar es la troncalidad. Conviene recordar que Medicina de Familia logra que el sistema de salud sea uno de los mejores.

Adrián Alegre, jefe de Servicio de Hematología del Hospital La Princesa de Madrid: Tenemos el problema de la pérdida de atractivo de la especialidad. Hematología, que es una disciplina mixta y de apoyo a otras, está presente en todos los hospitales y hay 76 centros acreditados. Hay especialidades, como la nuestra, en las que resulta muy difícil elaborar un programa formativo de cuatro años, es un tiempo que resulta escaso.

César Casado, secretario general de la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (Secpre): Plástica es cierto que vive unos momentos de auge en lo relativo a la elección MIR, pero es verdad que ha sido una rama estigmatizada debido al ámbito de la estética. Sin embargo, cuando se incluyó este término en 2013, aportó un nuevo atractivo de cara a los estudiantes. No tenía presencia universitaria, pero se ha hecho un esfuerzo para que entrara en los planes de estudios.

Fernando Carballo, vicepresidente de la Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas (Facme).

Juana Sánchez, coordinadora del Grupo RYJE de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia.


¿Qué valoran los residentes a la hora de elegir plaza, por qué unas especialidades son escogidas antes y otras después?

Juana Sánchez: Cuando los estudiantes eligen las plazas valoran mucho el futuro que les espera como especialista. Tienen en cuenta el contrato o el prestigio social, entre otros conceptos. Hay mucho desconocimiento en las universidades. Un ejemplo claro sucede con Medicina de Familia. No se aborda en la universidad ni la prevención, ni la promoción de la salud, ni se trata a Familia como unidad, sino como un área parcelaria. La universidad enfoca la visión hacia la enfermedad, pero no encaminada a un concepto multidisciplinar. Otro punto de preocupación surge cuando comprobamos que hay más licenciados que plazas MIR y esta limitación supone un grave problema.

Fernando Carballo: Hay un sesgo inicial en la formación, nos hemos fragmentado y hemos tendido a desarrollar los intereses de las especialidades, pero sin visión de continuidad, por eso transmitimos unos conocimientos fragmentados a los estudiantes, lo que supone que sea un fracaso. Hay que potenciar la Atención Primaria y la práctica clínica. El último año debería ser un verdadero rotatorio para que los alumnos conocieran todas las opciones.

Fernando Malmierca: Atención Primaria debe ser el eje del sistema. Hemos comprobado que cuando los alumnos conocen la especialidad, muchas veces la eligen porque les atrae, nacen ahí sus vocaciones. Antes de proceder a la elección deberían conocer todas las vertientes.

César Casado: La clave está en la universidad. Coincidimos en que Atención Primaria es el eje del sistema, porque además funciona muy bien. Pero en las aulas no existe cultura de ella, ni se fomenta. Falta educación, en este sentido.

¿Y Bolonia no ha arreglado ese aspecto?, se supone que se fomentarían las prácticas…

Fernando Malmierca: ¿Bolonia existe? Porque la adaptación está siendo diferente en cada universidad y hay cierta confusión. Además, hay carencia de docentes en Medicina porque las condiciones que se están poniendo no son las más favorables.

Adrián Alegre: El desconocimiento de la especialidad produce la recirculación del MIR, los residentes se equivocan y es un fenómeno a evitar. Pero hay muchos factores, eligen en función del número de orden, y también influye la vocación, las modas, el factor geográfico y las expectativas laborales, fundamentalmente.

Juana Sánchez: Hay un desconocimiento enorme cuando van a elegir. Las unidades docentes de Medicina de Familia deberían abrirse mucho más y antes para que se conozca lo que hacen.

Fernando Carballo: Primaria ha dado importantes avances gracias a su carácter reivindicativo. Lo que resulta verdaderamente histórico es el divorcio histórico entre Sanidad y Educación, lo que propicia que la Universidad no se oriente a la continuidad. Sería interesante  que existieran estructuras docentes en los hospitales. Habría que sentarse  y pensar si sería útil realizar una “Bolonia propia”.

Fernando Malmierca: Para aumentar la carga práctica se necesita infraestructura y financiación, de lo contrario es inviable.

En la elección de plaza, ¿los MIR tienen en cuenta la investigación?

Juana Sánchez: Los estudiantes que eligen Medicina de Familia  se van a aquellas unidades que hacen alta investigación, esta parte de su profesión la tienen muy presente a la hora de escoger, y pasa en otras especialidades. Los MIR se quejan de la carga asistencial y de la poca atención que les presta el tutor debido a que él también tiene esa carga, que prima sobre otras funciones.

Adrián Alegre: En los nuevos programas de formación habría que introducir un requisito para que roten por institutos de investigación para que tengan conocimientos y habilidades.

César Casado, secretario general de la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (Secpre).

César Casado: En España hay muy poca investigación, más allá de las especialidades y de la carga asistencial. La percepción que les llega a los alumnos es que los recursos económicos son escasos, que el sistema tiene una importante carga asistencial que lo imposibilita y que nadie les va a exigir una tesis doctoral y, por tanto, las publicaciones quedan en un segundo triste plano.

Fernando Malmierca: Esta situación no deja de resultar sorprendente, porque es diferente en Europa. Hicimos una encuesta entre MIR de Pediatría españoles y portugueses, los españoles dijeron que en este momento de su formación no les interesaba la investigación, sin embargo, todos los portugueses habían publicado en revistas internacionales y tenían tesis doctoral.

Juana Sánchez: Esto debe cambiar y hay que exigir la investigación, como sucede a los residentes de Europa, que sí investigan.

Adrián Alegre: Cuando llegan a los hospitales preguntan si hay proyectos o líneas de investigación, pero después la realidad del día a día les limita.

César Casado: No se les exige porque no hay una base legal a la que agarrarse. Todos tenemos una carga asistencial importante, pero no debe servir como excusa.

Fernando Carballo: La motivación también afecta. Los médicos debemos tener presente que la sociedad nos da una responsabilidad y nos otorga un crédito muchas veces desmedido, por esta razón no hay que conformarse y buscar la excelencia e ir más allá de la práctica clínica. Además, falta la meritocracia, trabajamos en un país que no ha desarrollado un buen sistema para la incorporación de las personas al mundo laboral, basado en méritos de conjunto.

César Casado: Hay que motivarles, pero predicando con el ejemplo. Es posible que no tardando mucho esto cambie y haya más tiempo para el tema formativo.

Juana Sánchez: Otro problema es que los tutores no están reconocidos.

Fernando Malmierca: Si se le da tiempo al tutor para la formación, ¿quién cubre su actividad asistencial?

Fernando Carballo: ¿Hay que liberar o pagar? Porque no hay que olvidar que la calidad asistencial también hay que mantenerla. En vez del café para todos, hay que retribuir según la implicación, la dedicación y los resultados que tenemos.

Adrián Alegre: La falta de tensión y de meritocracia y de autoevaluaciones sino que según se entra en el MIR ya se tenga el título, contribuye a que se pierda la calidad de algo que tenía mucho prestigio.

César Casado: La motivación se ha perdido en la medida que se ha perdido la dignidad del médico.

Ahora ha cambiado la elección MIR con la introducción de la nota de corte …

Adrian Alegre: Los estudiantes dicen que no es buena esta medida, que es demasiado excluyente, de hecho, se quedan fuera los recién egresados. Habrá que evaluarla, pero en este examen, que es prestigioso, el que alguien no supere el 35 por ciento de la media de los 10 mejores indica muy poco.

Juana Sánchez: La nota de corte hay que mantenerla, porque no se puede tener una plaza sin unos conocimientos.

Fernando Carballo: El problema es que cuando evalúas a la gente, lo haces para ver su grado de conocimiento o para opositar. Hay que mantener una élite para que los que tengan ese nivel puedan llegar al SNS en sus diferentes escalones y otras personas que puedan optar a otro tipo de ejercicio profesional, pero hay que garantizar que tienen el nivel de corte suficiente.

¿Hace falta introducir otros cambios en el examen MIR?

Fernando Malmierca: Yo creo que es bueno, pero hay que introducir cambios, se nos va a plantear un problema dentro de unos años con la troncalidad, habrá doble elección y debe ser muy meditado. Se debe escuchar a los estudiantes para hacer cambios en el modelo.

Adrián Alegre: Hay que revisar la troncalidad porque plantea una formación de cuatro años, dos de ellos genéricos, y es insuficiente para conseguir la movilidad por Europa. Se deben elaborar muy bien los programas de tronco para que en los dos años comunes no haya competencias específicas. El problema es presupuestario.

César Casado: El debate de la troncalidad es un buen marco para plantear que no son años suficientes. El examen MIR, aunque no es perfecto y es muy mejorable, no es tan malo, hace justicia a la meritocracia. Yo soy partidario de prestar atención a los méritos de los alumnos conseguidos en el grado. ¿Por qué no hacer una entrevista personal que mida las capacidades? Esta medida da muy buenos resultados en otros países.

Fernando Carballo: Las habilidades y la aptitud deberían tenerse en cuenta. Sería interesante realizar una evaluación anual a cada residente para situar a cada uno.

Conclusiones del debate.

Conclusiones del debate.


Conclusiones:

César Casado: En Cirugía Plástica el aspecto laboral no está mal, porque hay un amplio campo de acción, público y privado, y un programa formativo extenso. Se puede entender desde una forma transversal. El problema es más grave en otras especialidades.

Adrián Alegre: En 2017 se cumplen 40 años del sistema MIR. Hay que realizar los cambios adecuados para mantener el prestigio y la competitividad. La troncalidad se convierte en una oportunidad, pero son necesarios recursos y publicar el registro de especialistas para realizar una planificación adecuada. No está bien que con lo que cuesta formar a un especialista, luego se vayan.

Juana Sánchez: El MIR es buen sistema, pero hay que hacer cambios en el pregrado. Yo apostaría por la ECOE de 6º. La precariedad es real y es triste que muchas veces los profesionales sean reconocidos fuera de nuestras fronteras y ninguneados por la Administración en nuestro país, con malos contratos.

Fernando Carballo: Es importante crear foros de debate que busquen el interés de la sociedad y no el interés de cada uno de los grupos. La precariedad laboral en Medicina es relativa en comparación con otros sectores. En Medicina existe una incertidumbre en cuanto a los años que son necesarios para entrar en el campo laboral.

Fernando Malmierca: Como pediatra celebro que en este ámbito no haya paro, pero es verdad que hay contratos que no son los más adecuados. Además, sabemos que hay puestos ocupados por médicos que no son especialistas en Pediatría. Demando también que haya más plazas, porque cada año las reducen y hacen falta.

Primera parte del debate.

Segunda parte del debate.