"El MIR no pregunta sobre informática y tampoco debe preguntar sobre IA"

El MIR es un cáncer. Así tildó el catedrático de la Universidad de A Coruña y académico correspondiente de la Real Academia de Medicina, Alejandro Pazos, a la prueba de acceso a la formación especializada de los facultativos. Una definición dada por considerar este examen excesivamente teórico, especialmente cuando el conocimiento médico se encuentra a golpe de chic. Además, no entiende que esta no evalúe las capacidades de los graduados como el manejo de la Inteligencia Artificial. Bajo su punto de vista, el ejercicio debe caminar a la vera de la innovación y no de la tradición, que ha hecho que el grado se centre "en la resolución de unas preguntas con un marcado carácter memorístico". Incluso, desaparecer. Un punto de vista que no comparten las universidades, de momento, no muy interesadas en la introducción de esta herramienta tecnológica en el temario de los futuros residentes.

La composición del examen MIR nace de los planes de estudios de las universidades. Por ello, de momento, no aparece ninguna cuestión relacionada con la Inteligencia Artificial. Y es que la mayoría de instituciones académicas que ofertan el grado facultativo no cuentan con materias que traten esta tecnología, salvo contadas excepciones. Por ejemplo, la Universidad Complutense de Madrid incluye una optativa denominada 'Aplicación práctica de la Inteligencia Artificial Generativa'. "Creo que puede resultar interesante para algunos estudiantes ampliar sus conocimientos en este campo. Pero ya está", ha destacado el decano de la facultad de Medicina de la entidad madrileña, Javier Arias, a Redacción Médica.

Pese a contar con nociones sobre esta tecnología en el programa, el representante de la Universidad Complutense no considera "prioritario" ampliar más la presencia de la Inteligencia Artificial ni tampoco incorporarla en las preguntas del MIR. "Lo veo un poco como la informática, un tema transversal a todo el conocimiento médico por ser una herramienta útil. Al igual que no se pregunta por computación o hay un bloque de estudio sobre el fonendoscopio, no veo porque el trato a este instrumento debería ser distinto", ha argumentado Arias.

"Las facultades no somos las encargadas de enseñar sobre tecnología, sino de aportar excelencia sanitaria", ha aseverado Arias

El decano no niega la relevancia de la Inteligencia Artificial, es más, la considera imprescindible para asuntos como la documentación sanitaria o la mejora de capacidad de diagnóstico. Sin embargo, no contempla que las facultades sean las encargadas de profundizar en su enseñanza, ya que, como sucedió con la informática o el Big Data, la mayoría de alumnos se formaron por otras vías. "Un profesional debe saber inglés o sobre la utilización de la tecnología, pero no es el objetivo del grado. Nosotros, como facultades, tenemos que garantizar que se forme como médico, que alcance la excelencia sanitaria. Cada zapatero a su zapato", ha puntualizado.

La llegada de la Inteligencia Artificial al MIR

A pesar de que todavía no se prevé la entrada de la Inteligencia Artificial en el MIR, hay voces que no ven tan lejana su admisión en los temarios. El mayor uso de estas herramientas supone un cambio del paradigma en el que sustenta la Medicina, cada día más cerca de un modelo más personalizado. Razón por la que no sería extraño que más adelante se sumarán universidades a la oferta de asignaturas relacionadas con esta herramienta o bloques dentro de las materias actuales en los que se presentasen los instrumentos más beneficiosos para el tratamiento de una patología, pese a que a día de hoy no se observan grandes cambios en los programas del grado en buena parte de las facultades.

De esta forma, la Digital & Data Manager de la Academia AMIR, Beatriz Carratalá, ve "probable" encontrar preguntas desde la perspectiva de las técnicas empleadas en el diagnóstico, prevención y curación de enfermedades. "Nos permite adaptarnos a lo que pueda llegar en un mundo tan cambiante y veloz", ha afirmado a este diario.

Y no solo cuestiones. La experta del centro formativo no descarta que en un futuro se incorpore la propia tecnología en la forma de realizar el examen. "Ya que muchas de las especialidades requieren un enorme conocimiento práctico. ¿Por qué no ponerlo a prueba durante el examen?", ha aseverado Carratalá. De esta forma, la Inteligencia Artificial sería puente a la generación de entornos virtuales inmersivos que repliquen casos reales. "Requeriría una gran inversión y un cambio de cultura con respecto a la prueba, pero creo que es la dirección en la que hay que trabajar", ha agregado.

"La incorporación de la IA al MIR requeriría de una gran inversión, pero es la dirección en la que hay que trabajar", ha apuntado Carratalá

Precisamente, este es el camino que descubre Pazos para la Formación Sanitaria Especializada (FSE). Una prueba más práctica en la que se valoren las competencias facultativas del egresado, como el abordaje de la relación médico-paciente, la vocación laboral o la capacidad de diagnóstico. Puntos en los que debería incidir la formación universitaria a su parecer.

Profesora para el MIR

Aunque no sea materia de estudio en la actualidad, la Inteligencia Artificial puede intervenir en el MIR como maestra para la preparación de la prueba. Y es que este instrumento permite un aprendizaje mucho más personalizado. "Cuando el alumno prepara un examen de este tipo, en los que los niveles de conocimiento y exigencia son muy altos, hay que adaptar el aprendizaje y optimizar el tiempo en lo que el alumno realmente necesita", ha apuntado Carratalá.

La Inteligencia Artificial es una solución para la mejora del rendimiento de aspirante a una vacante formativa en el Sistema Nacional de Salud (SNS). Por ejemplo, AMIR oferta una plataforma a sus alumnos en la que observa que materias debe repasar, cual es su progreso y el tiempo que ha dedicado al estudio. Asimismo, la academia dispone de un asistente académico virtual con una base de datos con más de 15.000 preguntas. Este ayuda a resolver las dudas que tienen los candidatos durante el proceso de preparación del ejercicio.