Sefac lanza una guía nutricional para el paciente oncológico

Con ella, se quiere ayudar al abordaje desde la farmacia de los pacientes con cáncer que presentan problemas nutricionales

Martes, 26 de enero de 2016, a las 16:02
Redacción. Madrid
La Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (Sefac), con el aval de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) y el soporte científico y patrocinio de Nestlé Health Science, ha elaborado una guía nutricional en pacientes oncológicos en la farmacia comunitaria. En la redacción de esta obra, coordinada por las farmacéuticas comunitarias y nutricionistas Adela Martín Oliveros y Yolanda Pontes Torrado y el oncólogo Pedro Pérez Segura, han colaborado expertos de Sefac junto con oncólogos, además de nutricionistas, dietistas y médicos endocrinológicos, con el objetivo de facilitar el abordaje coordinado de las personas con cáncer que presentan problemas nutricionales.
 

Jesús Gómez y Miguel Martín, presidentes de Sefac y SEOM, respectivamente.

La desnutrición constituye un problema de prevalencia de salud, que afecta a una gran población de pacientes con cáncer. Algunos tumores, como el cáncer de pulmón o el cáncer gastrointestinal, causan una pérdida de peso significativa en el 60 por ciento y el 80 por ciento de los pacientes, respectivamente, y una pérdida de peso de al menos un 10 por ciento del peso corporal en un periodo de seis meses.
 
La prevalencia de desnutrición en pacientes con cáncer oscila entre el 20 por ciento y el 40 por ciento en el momento del diagnóstico de cáncer y el 70-80 por ciento en fases avanzadas de la enfermedad. La detección precoz de la desnutrición en el paciente oncológico es indispensable para poder realizar una intervención nutricional adecuada que permita disminuir complicaciones, optimizar la respuesta al tratamiento, evitar la muerte precoz y mejorar la calidad de vida del paciente. El presente documento supone un gran paso adelante para lograr esta serie de objetivos e incluye información práctica al respecto para facilitar la labor de los profesionales farmacéuticos.
 
La guía señala la importancia del farmacéutico comunitario en el consejo nutricional en pacientes no seguidos a nivel nutricional desde el hospital. El reconocimiento temprano del riesgo de desnutrición en pacientes oncológicos puede realizarse con métodos de cribado sencillos, que pueden ayudar a estabilizar o revertir la pérdida de peso en un 50 por ciento en el 88 por ciento de los casos. El farmacéutico comunitario, en colaboración con el oncólogo y el resto del equipo de salud, puede desempeñar un papel muy activo para detectar este tipo de problemas. Como señala Adela Martín, coordinadora de la guía y de la comisión de Investigación de Sefac, “el farmacéutico comunitario es un profesional sanitario que atesora conocimientos en medicamentos y nutrición pero, además, la farmacia es el punto sanitario más cercano a los pacientes, al que con más asiduidad acuden cuando no están hospitalizados y donde también existe un contacto habitual con sus familiares, a los que se puede ofrecer un soporte y un asesoramiento de gran ayuda para dar una adecuada continuidad asistencial”.
 
Entre otros aspectos, la Guía de Actuación nutricional en pacientes oncológicos en la farmacia comunitaria aborda la relación entre la patología oncológica, desde su prevención hasta la fase final de la enfermedad, y el estado nutricional y la dieta. Una adecuada alimentación ayudaría a prevenir el 35 por ciento de todos los cánceres, proporción equiparable al porcentaje de tumores que se evitarían abandonando el tabaco. Desde el punto de vista epidemiológico, como se señala en el documento, una alimentación rica en productos de origen vegetal puede reducir el riesgo de algunas enfermedades crónicas relacionadas con el estrés oxidativo, entre ellas en cáncer. La dieta mediterránea ha demostrado tener un papel protector no solo frente a la enfermedad cardiovascular y enfermedades metabólicas, sino también frente a ciertos tipos de cáncer.
 
Además de reflexionar sobre las causas y consecuencias de la desnutrición en el paciente con cáncer, la guía dedica un capítulo a la incidencia de la intervención nutricional desde el ámbito de la farmacia comunitaria. En él explica que un adecuado tratamiento nutricional contribuye al control de los síntomas relacionados con el cáncer (anorexia, náuseas, vómitos, diarrea, mucositis, etc.), y reduce las complicaciones posquirúrgicas (fístulas, dehiscencia de sutura, entre otras) y la tasa de infección. Además, mejora la tolerancia al tratamiento y aumenta la respuesta inmunológica en el huésped.
 
La guía, que incluye abundante material gráfico y tablas con recomendaciones, contiene también un apartado de más de 40 consejos y preguntas frecuentes que pueden ser de gran utilidad en el día a día de los profesionales de la farmacia comunitaria como, por ejemplo: ¿Varía el riesgo y la incidencia de desnutrición en función del origen del tumor?, ¿Cuáles son las bases para una buena práctica del consejo nutricional? y ¿Qué complicaciones del cáncer o su tratamiento deben ser tratadas con modificaciones en la dieta?, entre otras.