La crisis del
coronavirus dejará muchas lecciones valiosas para los responsables de la
sanidad española. Entre ellas, la de valorar un tejido empresarial que garantice el
propio abastecimiento, así como las compras públicas. Eso no quiere decir, no obstante, que estas tengan que basarse solo en el precio, explica
Olga Delgado, presidenta de la
Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH).
Entrevistada por
Redacción Médica para el documento público '
Lecciones del Covid-19 (qué ha aprendido el sector sanitario español ante la pandemia'), la líder de los farmacéuticos de hospital ha hablado sobre los aciertos y errores cometidos en la gestión de la epidemia de
Covid-19. Delgado se muestra muy concreta sobre cómo mejorar la aportación de su gremio: planes de contingencia ante los
desabastecimientos de medicamentos, abordar la
atención farmacéutica telemática y el
envío de medicamentos al domicilio del paciente son algunas de las principales ideas a desarrollar para estar preparados para una futura crisis de
salud pública.
Aciertos y errores cometidos durante esta crisis.
Considero que ha sido necesario tomar medidas muy impactantes en la sociedad, pero
la situación sanitaria ha estado totalmente desbordada en algunas comunidades autónomas, que se han visto excedidas en su capacidad de respuesta y que solo contaban con el buen hacer y entrega de sus profesionales que, en muchos casos, se han visto desprotegidos respecto a la pandemia. Aunque ha sido una situación inesperada, sí teníamos el ejemplo de China y de Italia, y las medidas de confinamiento llegaron tarde mientras se daban mensajes de tranquilidad. Por otra parte, han faltado totalmente los equipos de protección y
ha habido una situación crítica en el suministro de medicamentos para Cuidados Intensivos.
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"Hay que proteger nuestro país y cuidar nuestro sistema sanitario público en todos los niveles asistenciales"
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Valoro positivamente la capacidad de intervención de las autoridades sanitarias en priorización de fabricación de medicamentos críticos, soluciones hidroalcohólicas o intervención de precios. Pero
el punto más positivo ha sido la unión y colaboración de los profesionales, la ayuda desinteresada allá donde fuera necesario y la versatilidad de reacción de los equipos asistenciales.
Ante una crisis similar futura, qué medidas deberían adoptarse en cuanto a recursos humanos, recursos materiales, y gestión/organización.
Esta grave situación que estamos pasando debe enseñarnos que necesitamos equipos de sanidad pública muy potentes y un sistema sanitario más fuerte, más equipado y más preparado para afrontar situaciones similares en el futuro. También deberíamos valorar la producción propia y la capacidad de respuesta de nuestro tejido empresarial ante situaciones de crisis. Es muy importante valorar este aspecto en los concursos públicos de compras.
No todo es el precio, hay aspectos más importantes que tenemos que fomentar para tener un país preparado para hacer frente a crisis mundiales de este tipo. Hay que proteger nuestro país, y hay que cuidar nuestro sistema sanitario público con mucha más atención, en todos los niveles asistenciales.
Qué podría aportar la Farmacia Hospitalaria que no haya podido aportar en la crisis actual
La Farmacia Hospitalaria ha adaptado todos sus procedimientos a la nueva situación, pero de cara al futuro, tendríamos que tener planes de contingencia bien elaborados, de personal y especialmente de medicamentos críticos, con valoración y previsión de tratamientos alternativos en casos de desabastecimientos, y tener disponible desde ahora en adelante sistemas de atención farmacéutica telemática y en el domicilio de los pacientes. Hay cambios que ya formarán parte de la nueva realidad.
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