“La
Farmacia Hospitalaria de Madrid es el Sermas, es una línea estratégica fundamental”. Así de clara se ha expresado
Bárbara Fernández Álvarez-Robles, gerente asistencial de Atención Hospitalaria del Servicio Madrileño de Salud, durante el
I Encuentro de la Farmacia Hospitalaria Madrileña, organizado por
Redacción Médica con la colaboración de las sociedades española y madrileña de Farmacia Hospitalaria (SEFH y SMFH) y patrocinado por Akcea, Alexion e Intercept.
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Un momento de la intervención de Fernández Álvarez-Robles.
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Fernández ha destacado que el hecho de integrar la
Farmacia Hospitalaria en la cadena asistencial, “junto con la Farmacia de
Atención Primaria y la de
residencias, que estamos empezando a integrar, está mejorando los resultados en salud”.
Así, ha destacado la mejora que ha habido en adherencia y
costes del tratamiento, pero también “queremos que la
estancia media en el hospital se reduzca, que haya más asistencia domiciliaria, incorporar las nuevas terapias, etc.”
Comisión de Farmacia y Terapéutica centralizada
Durante la mesa
‘Cartera de servicios y perfiles profesionales en Farmacia Hospitalaria’, la moderadora,
Eva Negro, ha recordado la
renovación de la Estrategia madrileña de Farmacia Hospitalaria, de la que es coordinadora, destacando una de las líneas estratégicas que se ha propuesto para su renovación: la de la creación de un
Comité regional de Farmacia y Terapéutica, que concentraría la evaluación de la complejidad de los nuevos tratamientos, algo que se hace ahora de manera descentralizada.
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García Gil ha llamado a perder el miedo "a las dependnecias orgánicas y funcionales"
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En este sentido,
Mario García Gil, jefe del Servicio de Farmacia del Hospital de Fuenlabrada, destaca que esta comisión centralizada es “algo de sentido común” y que “nos ayudaría a gestionar de forma más eficiente el tiempo”.
Hablando de
perfiles profesionales, el farmacéutico ha hecho un llamamiento a perder el miedo “a las dependencias orgánicas y las dependencias funcionales”. Es decir, a pertenecer a un Servicio y trabajar para otro, como los farmacéuticos que se integran en los equipos asistenciales. De esta forma habría “farmacéuticos en nuestros equipos que funcionalmente no dependen de mí”.
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De izquierda a derecha: Bárbara Fernández, Eva Negro y Mario García.
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Además, apuesta por potenciar el
perfil del técnico de Farmacia, “que nos aporta mucho valor” y “ayuda a relacionarnos mejor con los pacientes y sus familias”.
Homogeneizar la formación del técnico de Farmacia
A esto ha respondido Eva Negro señalando que, aunque “hemos dado un paso de gigante” al incorporar esta figura, “hay que
formalizar un plan formativo, porque los técnicos no tienen la misma formación en Madrid que en otras comunidades autónomas”.
Por ejemplo, en Madrid “han incorporado un
módulo de Farmacia Hospitalaria”, no así en otras regiones. Negro también ha destacado la necesidad de una “capacitación superior” para manejar medicamentos peligrosos o terapias avanzadas.
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