“Para invertir hay que desinvertir”. Así de claro se ha expresado María Jesús Merayo, directora general de Política Sanitaria del Principado de Asturias, durante la clausura del 61º Congreso de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH), que se ha celebrado en Gijón hasta este viernes.
“Desinvertir en lo que no suponga valor, tanto en medicamentos como en tareas”, ha afirmado. Así se garantizará una “prestación eficiente que garantice de forma sostenible el acceso al a innovación”. Esta, la innovación, “no puede ser un problema, sino que tiene que ser la solución.
Por eso la directora de Política Sanitaria asturiana apuesta por la evaluación de medicamentos “entendida como algo dinámico”, la obtención de resultados en salud provenientes de la práctica clínica, establecer redes para el conocimiento y buenas prácticas.
En la línea de la SEFH, Merayo ha sostenido que “los farmacéuticos tienen que salir del hospital” ya que el paciente no desaparece cuando sale del mismo, y ha marcado el entendimiento y la cooperación con el resto de niveles asistenciales (farmacia comunitaria y de Atención Primaria) como el “camino ineludible que hay que entender”.
La clausura también ha servido para la entrega de los premios SEFH a las mejores comunicaciones orales y casos clínicos. Además, por primera vez se ha concedido el premio Roberto Marín al mejor residente de Farmacia Hospitalaria, que ha sido para María Rosa Cantudo Cuenca.
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