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Sobresalientes en Medicina, un ‘plus’ que no garantiza ser un buen médico

Varios profesionales afirman que la teoría en la carrera es importante, pero también la práctica clínica en el hospital

Julio Armas, Juan Carlos Lorite y María Guiral.

22 may 2024. 17.30H
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Como en cualquier grado universitario, hay alumnos de Medicina que pueden llegar a destacar demostrando una excelente memoria fotográfica o la capacidad de sintetizar el estudio, lo que hace que les resulte más fácil aprender el temario y, por ende, sacar sobresalientes. Pero, ¿obtener unas notas altas está directamente relacionado con convertirse en un médico formidable?



Para Julio Armas, médico de Urgencias, la respuesta es no. Según ha afirmado a Redacción Médica, unas calificaciones “muy altas” en la carrera de Medicina suponen una “ventaja” en la formación como profesional, pero no es una “carta de triunfo” para luego ser un buen facultativo, porque hay otros factores externos en la parte práctica que intervienen en la ecuación.

A pesar de que “más del 50 por ciento” de los que sacan buenas notas se convierten luego en grandes profesionales, también hay casos de alumnos que no han destacado tanto en la parte teórica pero que, posteriormente, demuestran que tienen "muchísimas habilidades" en la práctica clínica. “Por ejemplo, al tratar con el paciente, a tener empatía, a la hora de buscar e indagar sobre una enfermedad, a establecer los diagnósticos adecuados o a la búsqueda de los tratamientos, entre otros”, ha resaltado.

¿Influyen las notas de Medicina a la hora de ser buen médico?


Una opinión que ha sido compartida, prácticamente en su totalidad, por Juan Carlos Lorite, R2 de Endocrinología, quien ha reconocido que sacar sobresalientes durante la carrera “se suele” asociar con obtener un buen número en el MIR, pero no con ser mejor médico. “Es cierto que hay que tener tener muchos conocimientos teóricos, pero también tener empatía, tacto y ser una buena persona con los pacientes”, ha indicado.

En este sentido, Lorite ha afirmado que las nuevas generaciones de estudiantes cada vez dan más importancia al aspecto “sentimental”, algo que le alegra porque, según su opinión, antiguamente se solía tener este tema “más olvidado”.

Por estos motivos, este futuro especialista ha afirmado que, por mucha teoría que un alumno conozca, si no sabe trasmitirla bien a los pacientes en un contexto de cercanía, la persona a la que atiende “no se va a enterar bien” y no desarrollará un espacio de confianza con el profesional.

Características necesarias para convertirse en un buen médico

La opinión de María Guiral, R1 de Psiquiatría, no dista mucho de lo expresado por Castro y Lorente. En su caso, que un estudiante obtenga sobresalientes durante la carrera sí que afecta positivamente en su formación, pero nada garantiza que se vaya a convertir en un buen médico. “Hay otras muchas habilidades que intervienen, como la empatía, la amabilidad, el saber trabajar en equipo o el crear un ambiente de trabajo”, ha afirmado.

Por lo tanto, aunque es importante obtener unas altas calificaciones para formarte de la mejor forma posible, hay otro tipo de cualidades que no se evalúan durante los seis años en Medicina y que tienen la misma importancia. “Si sabes mucha teoría, pero luego estas habilidades no las aplicas a la práctica clínica, no te sirve de nada”, ha concluido.
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