Los profesores tienen una capacidad limitada para predecir qué dificultad tendrán las
preguntas de opción múltiple para los estudiantes de
Medicina. Según un estudio publicado por
BMC, solo el
33 por ciento de las predicciones de dificultad realizadas por los expertos se ajustaron al nivel real de las preguntas, lo que deja un margen del 67 por ciento de variabilidad atribuible a otras variables “no exploradas”.
El estudio sugiere que los examinadores, a menudo responsables de diseñar y evaluar las
pruebas de Medicina,
no tienen una idea precisa de cómo de complejos serán sus
exámenes para los alumnos de Medicina. “El poder limitado observado (33 por ciento) de los evaluadores para
predecir los valores de dificultad reales evidenció el desafío de capturar los detalles de la dificultad de los ítems del examen
solo a través del juicio de expertos”, señala.
Variables en la dificultad de los examenes de Medicina
El informe, que analizó
200 preguntas de opción múltiple del examen de licenciatura médica en Etiopía (Ugmle) y las calificaciones de dificultad de seis expertos, reveló también
disparidades entre las predicciones de los diferentes evaluadores de la . Si bien algunos mostraron una correlación positiva moderada entre sus predicciones y los resultados reales de los
estudiantes de Medicina, otros apenas lograron coincidir. “Los resultados del análisis mostraron una correlación positiva moderada estadísticamente significativa entre las calificaciones promedio de los evaluadores y las
puntuaciones de dificultad reales”, detalla el documento.
Uno de los factores que puede estar detrás de estas diferencias es la
subjetividad de los expertos, que puede estar influenciada por
sesgos personales y
suposiciones sobre los conocimientos de los estudiantes. Según el informe, “es posible que esta subjetividad no siempre coincida con la dificultad real a la que se enfrentan los examinados”. Esto puede llevar a que las preguntas
parezcan más fáciles o más difíciles desde la perspectiva del profesor, pero no reflejen adecuadamente el nivel de desafío que suponen para los alumnos.
Necesidad de ajustar los exámenes a la práctica médica
Para abordar este problema, el estudio sugiere la necesidad de
procedimientos de revisión más “estrictos”, ajustes en las pruebas para reflejar los cambios en la educación y la práctica médica, y un mayor uso de “análisis estadísticos” que ayuden a
identificar discrepancias entre las predicciones y los resultados reales.
“El procedimiento del examen debe actualizarse con frecuencia”, recomienda el informe, lo que incluye la
formación continua para mejorar la capacitación de los redactores de preguntas - en este caso los profesores - para vaya en sintonía con las
metodologías de evaluación actuales y la creación de mecanismos de retroalimentación que permitan
mejorar los exámenes en base a los resultados obtenidos.
“Si no existe un circuito de
retroalimentación en el que se revisen los resultados de las
preguntas de opción múltiple y se realicen mejoras en respuesta al desempeño real de los examinados, también puede haber
discrepancias persistentes entre los niveles de dificultad percibidos por los expertos y los niveles reales de dificultad”, sentencia.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.