Ser un
buen médico es mucho más que ser una persona con un expediente académico brillante. Tradicionalmente, se ha presupuesto que los que quieren estudiar Medicina es porque son muy estudiosos, pero se ha dejado de lado comprobar si tienen o no cualidades necesarias para desempeñar la profesión, como la empatía y el humanismo. ¿Debe tenerse en cuenta el
perfil personal del futuro médico para entrar en la carrera? ¿El
acceso a Medicina debe depender de algo más que de las notas? ¿La
EBAU debe acompañarse con otras pruebas?
Esta y otras preguntas se van a debatir este miércoles en la jornada
'Proceso de Admisión en Medicina: ¿Algo más que las calificaciones?' en la
Universidad HM de Ciencias de la Salud de la Universidad Camilo José Cela. Varios expertos debartirán cómo se debe cambiar
el acceso a la carrera en un momento de transformación social general y en el que ha irrumpido ya la inteligencia artificial. El foco del encuentro es poner encima de la mesa si es idóneo que la EBAU, antigua Selectividad, siga siendo el único 'filtro' para entrar, teniendo en cuenta
la naturaleza de la profesión médica.
Paloma García de la Peña, directora del Grado en Medicina de la
Facultad HM de Ciencias de la Salud de la UCJC, explica que sería importante realizar tres tipos de prueba: la EBAU en primer lugar, pero también un
examen psicotécnico y una entrevista personal.
Y es que para esta experta, que también es reumatóloga, nos encontramos en un momento de crisis. "La mitad de quejas de los pacientes vienen de la mala comunicación con sus médicos", por lo que es imprescindible que
un médico sea empático, humanista y con buena comunicación. Por tanto, ve muy positivo que esto se mida en las
nuevas generaciones de médicos y no solo tener un expediente brillante.
Expediente brillante para entrar en Medicina
Además, que si solo se tiene en cuenta las notas académicas se genera mayor
frustración. Un estudiante brillante que entra en Medicina solo por sus buenas notas se va a encontrar allí a otros compañeros con expedientes brillantes con los que tiene que competir. Y el quedar 'por abajo' genera una frustración.
De ahí lo interesante de poder realizar una entrevista personal y un examen psicotécnico. De la Peña sabe que es muy subjetivo y que no es algo fácil, pero que hay que empezar a trabajar en ello. "
La vocación no se puede medir, pero en una entrevista se pueden hacer ciertas preguntas para conocer a la persona, para conocer su comunicación verbal y no verbal". En cuanto al examen psicoténico, para la experta debe estar unificado y que se realice
igual en todas las comunidades autónomas.
El mensaje final es que se trata de
formar médicos para el mundo y no médicos para un hospital concreto. "Hay que recuperar el humanismo y combinarlo con los tiempos actuales".
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