Pilar Lozano, estudiante de 3º de Enfermería en la Universidad Autónoma de Madrid y
presidenta de la Asociación de Estudiantes de Enfermería (AEEE), se une a la segunda edición del documento
Lecciones Covid-19. Un trabajo coordinador por
Redacción Médica en el que la representante de los estudiantes analiza la situación que se vive en las Facultades de Enfermería y cómo la experiencia de lidiar con una pandemia como el coronavirus en su etapa educativa puede ser "beneficiaria" en un futuro.
¿Qué errores se han cometido durante la primera ola de la crisis y se están repitiendo en la segunda? ¿Ha habido algún acierto en la gestión de marzo y abril que haya mejorado la situación en noviembre?
Como acierto se podría considerar pasar el curso a formato no presencial, pues están disminuyendo los contagios en el ámbito universitario, sin embargo, la situación que se generaba en septiembre con prácticas clínicas (y que a día de hoy, siguen sufriendo muchas comunidades autónomas) responde a una falta de planificación.
"La solución para frenar el covid, no ha pasado nunca, ni sigue pasando por mucho que se empeñen algunos, por echar a los estudiantes de sus prácticas clínicas"
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Los estudiantes hemos sido los grandes olvidados de esta pandemia, y sin embargo, somos los primeros en el punto de mira a la hora de señalar la causa de posibles contagios. Desde luego, la solución para frenar el covid, no ha pasado nunca, ni sigue pasando por mucho que se empeñen algunos, por echar a los estudiantes de sus prácticas clínicas.
¿Qué medidas deberían adoptarse en cuanto a recursos humanos, recursos materiales y de gestión/organización?
Todo pasa por la contratación de más profesionales, con contratos estables y dignos, no de días ni horas, ni eventuales ni en el equipo volante donde cada día estés en un sitio. Y evidentemente, recursos materiales para que estos puedan trabajar. Porque un hospital no es un edificio, ni una cama de hospital un mueble. Tener infraestructuras y materiales sin profesionales altamente cualificados para ello, con días de descanso, sin burnout, solo aboca al fracaso.
¿Qué podría aportar su organización que no haya podido aportar en la crisis actual?
Somos la voz de todos los estudiantes de España que son socias, a las que representamos, y seguiremos reclamando lo mismo que hemos hecho siempre, prácticas clínicas dignas y de calidad. Si ser sanitario implica riesgo, ser estudiante implica seguir formándose a pesar de él. Además, nos beneficiaríamos de poder formarnos en el contexto epidemiológico actual, hecho que es cada vez más necesario viendo la evolución tan longeva del covid-19.
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