La demanda para estudiar un ciclo de
Formación Profesional (FP) sanitaria es cada vez más alta. Según datos del
Ministerio de Educación y Formación Profesional, durante el curso 2021-2022, más de 27.000 alumnos obtuvieron un grado superior en FP del ámbito de la sanidad y cerca de 34.000, consiguieron un grado medio. Sin embargo, la oferta de plazas no siempre se adapta a ese alto nivel de solicitudes de ingreso, lo que provoca que muchos de los aspirantes se queden sin hueco.
La
Comunidad de Madrid es una de las regiones que sigue teniendo un problema a la hora de atender toda la demanda de FP en materia sanitaria, según un estudio de CCOO. Pese a que la oferta de grupos en los centros públicos ha crecido un 35,8 por ciento este curso académico con respecto al anterior y de que, por consiguiente, el número de alumnos admitidos ha aumentado en un 5,23 por ciento, el
66,9 por ciento de las personas que piden acceder a un ciclo sanitario -más de 10.000- se queda sin plaza, cifra superior a la media de todas las especialidades, que se queda en el 53 por ciento.
Los datos son incluso peores si nos fijamos sólo en los once ciclos de
FP de grado superior que se ofertan en la región: de las 9.181 solicitudes que se han presentado para este curso, el 79 por ciento han quedado excluidas. Y aunque en el caso de la
FP de grado medio, el nivel de jóvenes que se queda sin plaza es mucho menor, también representa cerca de la mitad de la demanda, el 47,9 por ciento de las 5.802 solicitudes totales. Cabe resaltar que esta circunstancia contrasta con el hecho de que
los grados de FP en sanidad son los más atractivos para el alumnado de toda España.
Pese a ello, el informe de escolarización de CCOO revela una
ligera mejora en los datos de exclusión, que ha caído 2,6 puntos en comparación con el 69,5 por ciento registrado en 2022. En el caso del grado superior, el porcentaje también ha mejorado en 2,5 puntos con respecto al 81,5 por ciento del año pasado, y en cuanto al grado medio, la mejora ha sido mayor, de 6,3 puntos en comparación con el 54,2 por ciento de 2022. A ello hay que añadir que se ha admitido, entre grado medio y grado superior, a un
5,23 por ciento más de alumnos que el curso previo -de 4.701 a 4.947-, si bien estos datos se antojan insuficientes teniendo en cuenta que
la oferta en FP sanitaria ha crecido un 35,8 por ciento -de 173 grupos en 2022 a 235 en 2023-.
Crece la demanda en el grado superior y cae en el medio
Otro aspecto que destaca en el informe es que, a pesar de que ese incremento de la oferta, la demanda para cursar una FP sanitaria ha bajado, de media, un
2,92 por ciento, entre las 15.433 solicitudes de 2022 y las 14.983 de este año. Sin embargo, los datos son dispares dependiendo del nivel formativo. En el caso de la FP de grado medio, la demanda ha caído en casi un
13 por ciento, de 6.668 solicitudes de matriculación el curso pasado a las 5.802 de este. Pero en la FP de grado superior ha ocurrido lo contrario:
la demanda ha crecido un 4,75 por ciento -hubo 8.765 solicitudes en 2022 y ha habido 9.181 en 2023-, algo que, tendiendo en cuenta que la oferta para el grado superior es inferior a la del medio -68 grupos frente a 167-, explica, en parte que el porcentaje de jóvenes que se quedan sin plaza sea mucho mayor en el primer caso.
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