La vida de
Irune Cea dio un giro de 180 grados cuando, trabajando como enfermera en la
sala de partos de un hospital de Barcelona, una de sus compañeras le contó que había otras
vías más allá del EIR para alcanzar su sueño de convertirse
en matrona. Lo que no sabía todavía es que lo haría, irónicamente, en la ciudad con mayor tasa de natalidad de Europa. Tras casi un año cursando esta especialidad en Budapest, reconoce que
las ventajas que ofrece este sistema, adaptado a las enfermeras españoles, compensan el hecho de
no percibir ningún tipo de remuneración durante los dos años de formación.
Tal y como cuenta en este nuevo episodio de
'Sanitarios en..', lo que más le llamó la atención de Hungría es que, para convertirse en matrona, no tenía que realizar la residencia como en el Sistema Nacional de Salud, sino una
carrera universitaria de cuatro años, la mitad, en su caso, al ser española. De hecho, este Grado está pensado
para que las enfermeras españolas puedan olver a España a ejercer como especialistas.
¿Cuánto gana un sanitario en Budapest?
Aun así, no es ‘oro todo lo que reluce’ y Cea reconoce que la calidad de vida en Hungría no se encuentra a la "misma altura" que la de otros países europeos. Por este motivo, ha advertido que, aunque
los sueldos de los sanitarios "son mejores" que los de otras profesiones de allí, "no son nada comparados con los de España".
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