Verificar la formación continuada de los profesionales sanitarios y regular este proceso “para velar por la seguridad de los pacientes” es también una demanda de
Enfermería. Así lo asegura
José Luis Cobos, vicepresidente tercero del Consejo General de Enfermería de España (CGE), quien se muestra partidario de la instauración de un
sistema de recertificación enfermera, con un punto de partida de 10 años,
para todas las profesionales. Sin embargo, la propuesta del Ministerio de Sanidad, recogida en el borrador del
nuevo Real Decreto de Especialidades, solo contempla la comprobación del mantenimiento de competencias para el colectivo médico.
En declaraciones a
Redacción Médica, Cobos sostiene que la profesión recibiría "con agrado" la implantación de este proceso, pero
“con cautela”. “Nos gustaría seguir trabajando en esta línea, pero
no queremos que sea un sistema fiscalizador, sino que permita dar seguridad a los pacientes y que vele por los profesionales que están puestos al día”, incide el vicepresidente tercero.
Por otro lado, remarca que el sistema de
recertificación no debe basarse en un examen periódico para demostrar la valía de la profesión; una idea que el CGE solo contempla para aquellos enfermeros y enfermeras que han estado
apartados del ejercicio profesional durante un largo periodo de tiempo y desean reingresar en la actividad asistencial. “Se hace en otros países y es lo lógico para comprobar que uno sigue manteniendo sus competencias profesionales”, añade.
Para el resto de Enfermería, la profesión considera que lo óptimo sería verificar que se tiene un tiempo determinado trabajado en dicho periodo y que, además, se está realizando una
formación continuada.
Recertificación cada 10 años como punto de partida
En el sistema internacional, la media de recertificación se establece en cinco años. Sin embargo, dada la carga administrativa que supondría iniciar este proceso desde cero en España, Cobos defiende una
periodicidad de 10 años como punto de partida “oportuno”, como apunta el borrador del
nuevo Real Decreto de Especialidades para la recertificación médica. “Experimentalmente, el inicio se podría fijar en los 10 años por el volumen de trabajo administrativo, pero la tendencia tendría que ir descendiendo progresivamente hasta los cinco años; sería un periodo razonable”, matiza el enfermero especialista.
Sobre esta misma cuestión, el periodo de tiempo idóneo para verificar la valía de los profesionales, informa de que algunos países están optando por dos años, incluso uno. “El proceso se lleva a cabo con la
certificación al órgano regulador correspondiente de que el profesional continúa en activo y que está realizando una determinada formación continuada”, explica.
Sin embargo, a pesar de que el CGE confía firmemente en la comprobación de los conocimientos actualizados de enfermeros y enfermeras para una seguridad en la atención de los pacientes, consideran que la puesta en marcha de la recertificación enfermera en España sería, “en estos momentos”, precipitada. “
Es muy precipitado porque el Gobierno no se ha puesto en contacto con nosotros. No creemos que las cosas se tengan que hacer deprisa y corriendo”, defiende Cobos.
“Somos partidarios de que haya un sistema para verificar que los profesionales sigan manteniendo sus competencias, pero no de cualquier forma;
hay que hacerlo de una forma sosegada y pactada, con una participación de la organización profesional”, concluye.
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