La Sanidad Española se ha despertado este sábado con la desoladora noticia del fallecimiento de Íñigo Lapetra Muñoz, director de Comunicación del Consejo General de Enfermería, e indiscutible referente en la Comunicación Sanitaria en nuestro país.
Ejemplo de profesionalidad comunicadora y periodística, defendió la Deontología de la profesión incluso ante la Justicia cuando hizo falta, y con éxito además.
Íñigo ha sido maestro para una generación de periodistas sanitarios que hemos crecido en el periodismo de la salud gracias también a sus enseñanzas cotidianas.
Sus cualidades humanas las ha trasladado a su quehacer diario, siempre atento a dar la información precisa a los medios de comunicación que lo requerían. Su talante conciliador, positivo y entusiasta ha sido durante dos décadas un activo de mucho valor para la Profesión Enfermera.
Aunque no era enfermero de formación, su desempeño como líder de la Comunicación del Consejo General le ha convertido en una pieza esencial para comprender avances históricos de la profesión durante las últimas décadas. Como en el caso de la llamada prescripción enfermera, un logro que, en buena medida, se cimentó en nuestro país gracias a sus estrategias comunicativas.
Si la Comunicación ha sido su pasión profesional, en lo personal sus tres hijos, su madre y sus hermanos son quienes marcan su recorrido vital y su recuerdo.
Para ellos va el pésame de Redacción Médica.
También para los muchos amigos que siempre le recordarán con cariño y admiración dentro y fuera del sector sanitario, entre los que nos contamos humildemente.
Gracias Íñigo, te vamos a echar mucho de menos.
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