Las expectativas, sobre todo cuando no se cumplen, pueden ser un factor determinante a la hora de elegir quedarse en un trabajo o buscar una nueva carrera laboral. En el caso del sector salud, si hablamos de las enfermeras, estas profesionales suelen tener una idea en la cabeza, antes de desembarcar en el mundo laboral, que en multitud de ocasiones no se cumplen. Un estudio, liderado por la investigadora Andrea Koppitz, analiza
cuáles son los factores que ‘decepcionan’ a las enfermeras tras su año en el mundo laboral y hacen que su vocación se tambaleé.
El estudio, realizado con los datos de la Encuesta Nacional Suiza de Graduados de Profesionales de la Salud, apuntan a que las
mayores 'decepciones' de las enfermeras una vez entran al mundo laboral son el
tiempo que disponen para dedicar a cada paciente y la conciliación de la vida laboral y personal.
Decepción tras el primer año de trabajo
Los resultados, que salen del análisis de las respuestas de 533 graduados de Enfermería de seis universidades de Suiza entre 2016 y 2019 confirma que
todas las enfermeras se sienten "decepcionadas" tras un año trabajando en un hospital o centro de salud. Antes de terminar el grado, las expectativas de los estudiantes de Enfermería se centraban en dos aspectos: "contribuir a algo importante" y tener tiempo suficiente para dedicar a los pacientes".
Una vez estas mismas enfermeras entraron en el mundo laboral, al año los testimonios de las profesionales demuestran que esas expectativas no se llegan a cumplir. Entre las
mayores carencias que señalan estas enfermeras, tras un año de experiencia, se encuentra la
falta de tiempo con los pacientes, la falta de equilibrio entre vida laboral y personal y la falta de buena gestión.
El estudio, más allá de señalar los aspectos más decepcionante para las enfermeras, propone
mecanismos para mejorar la satisfacción de estas profesionales. "Estas expectativas pueden satisfacerse mejor mediante una evaluación, el primer año de desempeño profesional, sobre qué percepciones les harían cambiar de trabajo y qué les haría quedarse en su puesto", indican los investigadores.
Evaluar las expectativas enfermeras
Además, evalúa el impacto que puede tener en la organización de los sistemas sanitarios contar con este tipo de información sobre la situación de las enfermeras. "Pocas de las expectativas de los estudiantes de enfermería se cumplieron un año después de su graduación, por lo que
las instituciones sanitarias deberían mejorar las evaluaciones de necesidades para reforzar la plantilla de enfermeros desde las primeras etapas del empleo", indica el estudio.
Asimismo, los resultados subrayan "la importancia de contar con una mejor cultura de gestión en los centros" y pone como ejemplo algunos hospitales de Estados Unidos "que se sustentan en una
filosofía de cambio de perspectiva de la Enfermería". "Los resultados pueden utilizarse a escala internacional como referencia y como base para introducir posibles intervenciones para mantener a las enfermeras en los centros de salud y hospitales", concluye el estudio.
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