El
Sindicato de Enfermería, Satse, ha reclamado, en la reunión de uno de los grupos de trabajo del
Marco Estratégico para la Atención Primaria y Comunitaria, que se aumenten las plantillas de matronas que trabajan en este nivel asistencial, así como un mayor desarrollo de sus competencias, para poder ofrecer una
mejor atención y cuidados a los pacientes y ciudadanos.
En el transcurso de la reunión celebrada en el Ministerio de Sanidad, para trabajar de manera conjunta administraciones sanitarias públicas y representantes de los profesionales sanitarios en la definición de c
ompetencias, funciones y servicios de las enfermeras obstétrico-ginecológicas en Atención Primaria, Satse defendió que la potenciación de estas profesionales, a través de una cartera de servicios bien definida, sería una de las soluciones para mejorar en los próximos años este nivel asistencial.
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Satse entiende que la “renovación” de la Atención Primaria en nuestro país pasa por potenciar la labor de las matronas
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En este sentido,
el Sindicato de Enfermería se mostró partidario de que estas profesionales pueden hacerse cargo, de manera autónoma y con los medios materiales necesarios, de actuaciones asistenciales,
como la detección precoz de cáncer ginecológico, la indicación y seguimiento de métodos anticonceptivos no quirúrgicos y el asesoramiento sobre otros métodos, la atención al embarazo y puerperio y la prevención, detección y atención a los problemas de la mujer en el climaterio.
La falta de suficientes matronas en los
centros de Atención Primaria fue uno de los asuntos reiterados desde la organización sindical en la reunión del grupo de trabajo, apuntando que resulta absolutamente necesario un incremento de las plantillas para que haya, al menos, una enfermera obstétrico-ginecológica en cada centro de salud.
Más profesionales
Al respecto, Satse recuerda que, a nivel general, faltan enfermeras en Atención Primaria, apuntando que, según el estudio,
“Análisis de la situación de las enfermeras, matronas y fisoterapeutas en los centros sanitarios del país”, la población asignada a cada profesional puede llegar hasta las 1.800-1.900 personas, según la autonomía, resultando necesarios más de 15.500 enfermeros en Atención Primaria en el sistema sanitario público para igualarnos, al menos, a la media europea.
El Sindicato de Enfermería defiende que haya un cupo máximo de 1.500 personas por cada
enfermera en Atención Primaria y así lo ha planteado en la Ley de Seguridad del Paciente que ha impulsado, a través de una Iniciativa Legislativa Popular, y que ya se encuentra en el Congreso de los Diputados para su debate en próximas fechas.
Además de un refuerzo de las plantillas, Satse entiende que la “renovación” de la Atención Primaria en nuestro país pasa por potenciar la labor de las enfermeras, enfermeras especialistas en
obstetricia y ginecología y fisioterapeutas al ser las profesionales que, dentro del pleno respeto a las competencias que la ley otorga a cada profesión sanitaria, pueden dar una mejor respuesta a las necesidades de cuidados y atención a la población.
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