La nueva cualificación de
Formación Profesional sobre la
“Supervisión de la atención sociosanitaria para la promoción de la autonomía personal” continúa generando malestar no solo entre los profesionales de Enfermería, sino también entre los familiares de los residentes de los centros sociosanitarios. Tanto es así que, según la
Asociación por los Derechos de los Mayores y sus Familias (Ademaf), esta iniciativa propuesta desde Ministerio de Educación
“solo beneficia a la patronal del sector de las residencias”, al tratar de
“abaratar costes en la atención”.
Según explica la plataforma a
Redacción Médica, la nueva formación permitirá a la patronal poder
contratar trabajadores cada vez menos cualificados a un menor coste. “La precariedad ya existía, ahora se duplicará”, lamentan desde la asociación, defendiendo que la creación de esta cualificación no puede ser la herramienta para
mejorar la atención en centros sociosanitarios.
“No es el camino si se trata de garantizar calidad en los cuidados”, añaden.
Ante esta propuesta, la Ademaf critica que los perjudicados son “como siempre” los usuarios.
“Cada vez más está más lejos la posibilidad de recibir una atención digna y de calidad”, finalizan.
Las residencias apuestan por la FP sociosanitaria
A diferencia de Enfermería y familiares de los residentes,
las residencias sí que apuestan por la FP sociosanitaria. A este respecto, el
Círculo Empresarial de Atención a la Dependencia (Ceaps) considera que la Formación Profesional en Cuidados Sociosanitarios propuesta por el Ministerio de Pilar Alegría podría ser “útil”,
siempre que se acompañe de otras medidas y esté “consensuada con Enfermería”.
En declaraciones a este periódico, la patronal del sector defendió que la creación de esta nueva cualificación profesional, que se enmarca dentro de la Familia Profesional de Servicios Socioculturales y a la Comunidad, genere más contrataciones en detrimento de la de los auxiliares, pero que sí puede contribuir a
dar respuesta a la demanda “que en estos momentos no se puede cubrir”. “Cada categoría profesional es diferente, unas no pueden cubrir a otras”, señalaron.
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