Carlos Corominas / Imagen: Joana Huertas. Madrid
Dotar de mayores funciones a enfermería puede convertirse en una palanca para mejorar la eficiencia de la Atención Primaria, al menos en lo que respecta a su microgestión. Así lo han defendido los participantes en la jornada La Atención Primaria en el SNS organizada por la Fundación Ad Qualitatem.
Francisca Rodríguez Hervás, médico de apoyo en la Gerencia de Atención Primaria del Servicio Madrileño de Salud; Jaume Sellarés, director del Equipo de Atención Primaria de Serdanya y vicepresidente del Colegio de Médicos de Barcelona; José Luis Quintana Gómez, médico de familia en el Centro de Salud El Greco de Madrid y Francisco Peralta, director de la UGC Río Nacimiento, distrito de Almería, Servicio Madrileño de Salud.
|
"Para nosotros enfermería es un valor fundamental”, afirma Jaume Sellarés, director del Equipo de Atención Primaria de Serdanya y vicepresidente del Colegio de Médicos de Barcelona, que añade: “Es básico para dos elementos que suelen estar olvidados como es la atención a patologías agudas y la consulta inicial del paciente”.
Sellarés asegura que su equipo gestiona a unos 2.000 pacientes por doctor y que esto es posible porque “lo único que pueda hacer el médico lo hará el médico, pero lo que no deba hacer él lo hará otro profesional”. En este sentido, especifica que “un auxiliar de clínica o un administrativo también pueden controlar a los pacientes y redirigir a enfermería”. El rol de enfermería en este caso pasa por “preescribir, pedir información complementaria y hacer derivaciones”. A pesar de estas funciones, Sellarés aclara: “Todo se hace en base a un protocolo porque tampoco se puede hacer una historia clínica en la puerta del centro”.
Francisca Rodríguez Hervás, médico de apoyo en la Gerencia de Atención Primaria del Servicio Madrileño de Salud, también se muestra a favor de dar más responsabilidades a enfermería “porque está perfectamente preparada”. Ha destacado que existen experiencias en el que la enfermería tiene un papel muy importante en atención directo “como sucede con el Consorcio Aragonés de Alta Resolución (Casar), en el que el 70% de los pacientes piden pasar una primera consulta con enfermería”. Rodríguez Hervás está convencida de que si estos sistemas funcionan se deben trasladar a otras zonas: “Ahora que hablamos tanto de integración, tenemos que hablar también de integración en equipos”.
También en mesogestión y macrogestión
Pero los resultados positivos de dar mayores responsabilidades a enfermería no se restringen sólo a microgestión, las otras esferas de la Atención Primaria también se ven beneficiadas. “En una cadena nadie es más importante que otro y si alguien falla todo se para”, ha indicado José María Pino, director gerente de Atención Primaria del Área Este de Valladolid en la mesa sobre mesogestión, que ha añadido: “No es quién es más importante sino que todos somos imprescindibles”. Sin embargo, Pino reconoce que, al menos en Castilla y León, “todavía no hemos aprendido la lección y no lo vemos de forma global”.
Por su parte, Jon Guajardo, director gerente de la Organización Sanitaria Integrada de Barrualde-Galdakao del Servicio Vasco de Salud – Osakidetza, ha indicado en la mesa sobre macrogestión que “el modelo ideal es el de una integración asistencial para darle el protagonismo a cada parte del sistema y el protagonismo está en el médico y en enfermería de Atención Primaria”. Guajardo señala que el mayor inconveniente “es convencer de esto a políticos, financieros y gestores porque cada uno mira a su ombligo y pone barreras a cualquier cambio”.
ENLACES RELACIONADOS:
“La cronicidad está controlada, la dependencia no” (03/12/2015)
Aprobada la integración del Casar en el Salud (09/12/2015)