La Consejería de Sanidad de Aragón anunció que estudiará la posibilidad de retrasar la jubilación en Enfermería hasta los 70 años. Una propuesta que desde la profesión ha sido acogida con tibieza, y para la que ponen una condición clara: que alargar la vida laboral se traduzca en
ventajas económicas para las enfermeras que opten por esta opción.
"Estas profesionales tendrían que tener ventajas económicas, referidas a
incrementar la pensión, fruto del retraso de jubilación", aseguran a
Redacción Médica desde el Consejo General de Enfermería (CGE). Desde la organización ya pusieron de manifiesto en este periódico que la medida
no podía ser concebida como un mecanismo para paliar el déficit de enfermeras y que, en caso de que se aprobara debería "ser
voluntaria y contar con condiciones ventajosas estas enfermeras". Ventajas, que como confirman ahora, están relacionadas con el ámbito económico.
Mecanismo para paliar el déficit enfermero
La propuesta de Aragón pasa por revisar el Plan Estratégico de ordenación de recursos humanos del Salud, donde quedaría enmarcada esta propuesta de
ampliación de la jubilación enfermera. Como informó este periódico, el objetivo es
establecer herramientas para paliar la falta de enfermeras a medio plazo. Desde la Consejería argumentaron que esta situación ya se da en la profesión médica y que, en la actualidad, hay 302 facultativos que han prolongado su edad de jubilación.
Desde el Consejo explicaron a este medio que, para ellos, es muy importante que
esta medida no sea un parche para resolver la escasez actual de enfermeras. "Hay muchas otras estrategias a medio-largo plazo que pueden ser más efectivas y eficientes", explicaron.
Jubilación anticipada en Enfermería
Además, desde la organización explicaron que, bajo su opinión, la profesión de debe centrar en la
consecución de la jubilación anticipada a los 60 años,
sin pérdida retributiva, por penosidad. El CGE defiende que esta es la manera de reconocer la labor de las profesionales y la presión asistencial a la que se enfrentan, que se plasma en turnicidades y "duras condiciones laborales". Esta es una reivindicación que también persiguen desde el colectivo médico y que otras profesiones alejadas de lo sanitario, como policías o bomberos, ya disfrutan.
La jubilación por penosidad en Enfermería apuntaría a perfiles profesionales que se someten, en su actividad profesional, a condiciones especialmente estresantes. Diego Ayuso, secretario general del CGE, comentó a
Redacción Médica que las enfermeras que trabajan en
cuidados críticos, urgencias o áreas quirúrgica, así como las que forman partes de equipos con pacientes oncológicos o cuidados paliativos son las que deberían tener acceso a esta medida.
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