Si las previsiones se cumplen,
la sanidad romperá por segundo año consecutivo su techo de empleo gracias a la campaña de contrataciones del verano, que permite dar relevo a los profesionales que se encuentran de vacaciones. La consultora de recursos humanos
Adecco ha vaticinado que el sector alcanzará entre los meses de julio y septiembre un nuevo récord de
1.978.000 ocupados. Es una cifra inédita en la serie histórica.
Los expertos de la compañía han analizado la tendencia de las
últimas actualizaciones de la Encuesta de Población Activa (EPA) para calcular el escenario laboral más probable del tercer trimestre. Su proyección es que se incorporen a las plantillas en las ramas de la salud y los servicios sociales un total
67.000 personas más para afrontar las necesidades del periodo estival.
Más allá del factor estacional, el impulso en materia de empleo también representará un
fuerte crecimiento en comparación con el año anterior. La cifra de ocupados se disparará en 55.900 personas si tenemos en cuenta la plantilla sanitaria en todos sus ámbitos durante el verano de 2022.
Es un salto del 2,9 por ciento.
Las estimaciones de Adecco colocan a la sanidad y los servicios sociales en el mismo ritmo de crecimiento interanual que la media del conjunto de los sectores productivos (2,9 por ciento). Según sus cálculos, en el tercer trimestre del año se alcanzarán los
21.135.000 ocupados en toda España, lo que supone más de medio millón de personas que hace justo 12 meses y también un nuevo récord para la economía española.
La hostelería es el sector que protagonizará un mayor auge con 202.500 nuevos puestos de trabajo, lo que representa una mejora del 11,6 por ciento en comparación con el verano anterior. Es cuatro veces más que el crecimiento sanitario. En el otro lado de la balanza, las
manufacturas protagonizarán la destrucción de 44.700 empleos, lo que supone un 1,8 por ciento menos que hace un año.
La evolución del empleo sanitario
Los cálculos de Adecco confirman una tendencia en
el mercado laboral de la sanidad que no ha parado de crecer en los últimos años. Tras el estallido de la pandemia de Covid-19, los indicadores de empleo del Instituto Nacional de Estadística (INE) han ido reflejando
crecimientos constantes cada trimestre, independientemente de las variaciones propias de cada época del año.
En la última EPA, el número de ocupados en la salud y los servicios sociales alcanzó las
1.911.000 personas hasta situarse muy cerca del récord absoluto y mejorando cualquier recuento de un segundo trimestre. Si sacamos de la ecuación a los profesionales que ejercen en las residencias, la cifra se situó en
1,29 millones solo en las actividades sanitarias.
El resultado estuvo condicionado, en todo caso, por el
buen desempeño del sector privado que creció casi el doble de rápido que el público. Solo entre los meses de abril y junio, las empresas incorporaron
17.300 nuevos asalariados a sus filas, sin contar los autónomos que no aparecen reflejados en esta estadística.
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