El
proceso de feminización de la sanidad española ha tocado techo en 2022 como consecuencia del aumento récord que ha protagonizado el empleo entre la población masculina. Aunque la presencia de mujeres en las diferentes profesiones que conforman el Sistema Nacional de Salud (SNS) sigue representando una
mayoría abrumadora, la tendencia de los últimos años se ha frenado hasta situar su participación en un
74,5 por ciento del músculo laboral total del sector.
La
última actualización de la Encuesta de Población Activa (EPA) ha revelado que en el primer trimestre del 2022 había
1.268.700 mujeres empleadas en las diferentes actividades sanitarias. En el último año se han creado más de 30.000 puestos de trabajo en el sector salud que han ocupado las profesionales, lo que supone una
mejora del 2,4 por ciento. Sin embargo, en términos porcentuales el auge es ligeramente más moderado que el crecimiento de los hombres.
Aunque su presencia es minoritaria, los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística han cifrado el
empleo masculino en los meses de enero, febrero y marzo de en un total de
323.800 ocupados. La sanidad ha creado 14.800 nuevos puestos de trabajo ocupados por hombres durante el último ejercicio. Es un
salto del 4,5 por ciento. Es decir, el empleo entre este estrato de la población se ha generado
el doble de rápido que entre las mujeres.
Este impulso de la ocupación masculina en el SNS ha provocado que la representación de las sanitarias se haya visto ligeramente mermada tras tocar su techo. Su presencia ahora representa el
74,5 por ciento de los puestos laborales de la sanidad, lo que supone medio punto porcentual por debajo del
75 por ciento que se alcanzó en 2021 y que representa el
récord absoluto en la serie histórica del empleo.
La evolución del empleo femenino en el SNS
Esta moderación ha roto con una tendencia al alza que se había repetido durante los últimos años de manera sistemática. Hace una década
la presencia de mujeres en la sanidad representaba el 72,5 por ciento del empleo total del sector. Aunque por entonces el volumen de ocupados en ambos sexos era mucho más reducido, ya que apenas sumaban
897.000 personas entre los dos.
En todo caso,
la feminización en la sanidad sigue siendo una ‘rara avis’ en el mercado laboral de España que sigue copado fundamentalmenre por hombres. Los datos del INE han calculado que actualmente hay 10.924.900 varones ocupados en el conjunto de los sectores productivos, frente a
9.527.800 mujeres. Esta realidad deja el cupo de las mujeres en algo más del
46 por ciento del total. Son casi 30 puntos porcentuales por debajo de su fuerza laboral en el sector sanitario.
Las cifras están condicionadas por la fuerte presencia de hombres en algunos de los sectores más masculinizados como la
construcción, que apenas emplea a un 8,6 por ciento de mujeres,
la agricultura donde hay un 24 por ciento de ocupadas o la
industria manufacturera que cuenta con un 27,5 por ciento de empleadas femeninas.
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