El sueño de lograr una plaza PIR "es bonito a la vez que caótico"

La línea de meta para los aspirantes al PIR ya se vislumbra en la cercanía. Después de meses de trabajo y esfuerzo, los candidatos preparan los últimos retoques para la fecha señalada en el calendario del 25 de enero. Por ello, desde Redacción Médica, hemos querido hablar con Laia Angalda, residente de Psicología y docente de APIR, para diseccionar las claves para abordar la prueba y su preparación.

“Dudo que haya una estrategia que sea la mejor para todo el mundo, creo que lo mejor es que cada persona adapte el estudio a sus necesidades teniendo en cuenta que hay que estudiar muchísimo temario durante muchísimas horas. Cuando decides especializarte en psicología clínica tienes claro que solo hay una forma, presentarte a este examen”, resalta la residente para introducir los diferentes aspectos previos a la prueba. La dedicación varía según muchos aspectos de cada persona, pero el tiempo invertido siempre será elevado.

"Lo más importante es que las horas que dedicas a las distintas tareas sean productivas"

Además, Angalda la percepción de los miles de candidatos que se presentarán el próximo 25 de enero. “La mezcla de ilusión, incertidumbre, inseguridad y dudas de cómo llegar a cumplir tu sueño es bonita a la vez que caótica. Creo que es muy necesario tener una figura de acompañamiento que además de ser un soporte para todo lo que necesites a nivel emocional, esté constituida por personas que hayan pasado por lo mismo que tú y que ahora están haciendo la residencia o incluso ya son personal adjunto”, explica reconociendo la labor de la Academia APIR y se gestión a la hora de planificar su estudio teniendo en cuenta su situación personal.

Cómo preparar el PIR

“Lo más importante es que las horas que dedicas a las distintas tareas sean productivas”, reconoce la docente de APIR teniendo en cuenta el arduo camino que supone presentarse a un examen como este. Con ello, resalta la forma más efectiva para preparar el examen, donde destaca que siempre será “aquella que permita comprender, memorizar y repasar el temario sin recurrir a material especialmente denso como los manuales de referencia”. La fatiga y el agotamiento son peligrosos enemigos a tener en cuenta siempre que se prepara una prueba de estas características y evitarlos cada vez que se dedica horas al estudio es esencial para llegar al examen con las mejores nociones posibles.

“Decidí entrar en la academia que me preparó porque los manuales me parecían sencillos, entendibles y memorizables; de hecho, durante el examen en el que saqué plaza recordaba perfectamente en qué página estaba tal tabla con ese dato que mi cerebro necesitaba para responder. El temario es muy amplio, y a mí me iba muy bien tener manuales, diapositivas, clases, flashcards y esquemas ya desarrollados por los profesores que podía revisar las veces que necesitase”, desarrolla para exponer cómo fue su experiencia ante la prueba.

"Es importante que las horas de estudio sean las máximas sin llegar al agotamiento"

Junto a ello, también destaca la importancia del descanso en este tipo de preparaciones. Las horas de sueño y saber desconectar en los momentos apropiados para hacerlo son los mejores aliados para abordar el estudio de forma más eficiente. “Es importante que las horas de estudio sean las máximas que cada persona pueda asumir sin llegar al agotamiento. También es importante tener en cuenta la situación personal, laboral y familiar de cada opoPIR”, apunta Angalda recordando que en “en su primera convocatoria trabajaba y apenas podía estudiar 4 horas diarias. En cambio, en esta última estudió 8 horas al día aproximadamente durante todas las fases”.

“Lo más crucial para mi es empezar por un estudio comprensivo y algo más superficial, utilizando material más elaborado. A medida que avanzamos en las fases de estudio vamos cambiando a un material más resumido como pueden ser las diapositivas de las clases y los esquemas, que nos ayuden a fijar el conocimiento ya adquirido. También me parece imprescindible ir repasando las asignaturas que ya se han visto las semanas anteriores, que no se nos olvide nos facilita mucho el estudio posterior”, apunta como clave de su éxito.

"La preparación y el estudio son los principales factores, pero la suerte también juega un papel determinante"

El examen PIR ya se encuentra a la vuelta de la esquina y haber realizado un buen trabajo durante los últimos meses es crucial para el éxito de la prueba. Sin embargo, la residente en Psicología tranquiliza a los candidatos destacando que “la plaza se va construyendo cada día durante meses e incluso años” y que “además de que el principal factor es la preparación y el estudio, la suerte también juega un papel determinante”.