Veinticuatro horas después de la publicación de los
listados provisionales del PIR 2021, los estudiantes siguen asimilando los resultados. A
Paola Clemente Bas, número 2, la alegría apenas le ha dejado pegar ojo. Esta semana llegaba a la meta de un duro camino en el que ha ido de la mano con
APIR, academia que ha conseguido situar a 100 de sus estudiantes en las 198 plazas disponibles este año
Tras dos años y medio de preparación, esta estudiante alicantina ha conseguido su meta: convertirse en
psicóloga interna residente. SuLo ha hecho, además, con honores, al situarse en los puestos más altos del listado con un baremo de 9,53 y una
puntuación final de 101,36. Nada qué ver con sus predicciones iniciales nada más salir de la prueba. "Fue horrible.
Pensaba que había suspendido. Cuando vi a mi padre que me vino a recoger rompí a llorar pensando que todo el esfuerzo era en vano".
La sensación generalizada entre sus compañeros es que
este examen ha sido especialmente difícil al incluir "mucho contenido de nuevos manuales". Como prueba, la aspirante, de 24 años, destaca que las netas han bajado "mucho" con respecto al año pasado entre los aprobados. "A mitad del examen me eché a temblar al darme cuenta de que
no controlaba un montón de preguntas", cuenta Paola, sorprendida ya que venía de hacer simulacros en APIR con "muy pocos fallos".
Destino como factor decisivo al elegir hospital
Las estimaciones de las academias lograron tranquilizarla...y alegrarla ya que, para su sorpresa, casi todas la situaban en
primer o segundo lugar. Un puesto que mantuvo también tras las impugnaciones y que finalmente se ha hecho real en los listados publicados por Sanidad.
"No quería creérmelo del todo", reconoce Paola, después de que el año pasado se llevará un "golpe" al obtener plaza en los listados provisionales y no en los oficiales. Aún así reconoco que se quedó
impactada al enterarse de la noticia a través de sus compañeros. "Me eché a llorar", recuerda.
A la hora de elegir hospital, Paola tiene clara su prioridad: "
Quedarme en mi tierra, en Alicante". De hecho, tener que mudarse a otra comunidad era uno de los principales "handicaps" con los que temía encontrarse a la hora de realizar el PIR. El
destino es, por tanto, decisivo para esta estudiante a la hora de barajar opciones y decantar la balanza. Su primera opción será el hospital que ve cada día desde su ventana, el
Vega de Orihuela y que le permitiría realizar la residencia cerca de su familia y amigos. "Para mí es
calidad de vida poder levantarte e ir al trabajo a kilómetros de casa".
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