Desde la XXIX Reunión del Grupo Español de Dermatología Estética y Terapéutica (Gedet), celebrada recientemente en Las Palmas de Gran Canaria, se denunció que los centros de estética carecen a menudo de un dermatólogo que supervise, controle, diagnostique y sepa tratar de la forma más adecuada la piel.
La información que recoge sobre la jornada El Día, desvela la preocupación del sector por esta situación. En palabras de Antonio Campo Voegeli, uno de los ponentes invitados al evento: "La legislación debería supervisar más y establecer claramente qué tipo de tratamientos puede hacer cada persona".
Además, este especialista, que ejerce su labor en la Clínica Campo-Optimage de Barcelona, se mostró pesimista ante una posible solución del conflicto: "Nadie lo va a regular hasta el momento en que ocurra un problema".
Un médico especialista es necesario en caso de que se produzca una complicación en alguno de los tratamientos estéticos (por ejemplo la fotodepilación). Un dermatólogo podría resolver el problema y además hacer un mejor diagnóstico y tratamiento previo.
Voegeli también expresó su preocupación por el intrusismo de médicos de otras ramas en este ámbito: "La estética es un sector en el que hay muchos profesionales con especialidades no dermatológicas trabajando como tal, por ejemplo radiólogos o ginecólogos".
El dermatólogo atribuye esta situación a la coyuntura económica, que impulsa a los médicos a acudir a áreas pujantes como la estética.
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